“Lo dejaron solo a Messi y yo no lo quiero dejar solo. Por eso quiero hablar con él: para luchar contra todos los que los dejaron solo, del primero al último dirigente, de Segura hasta Verón, el que sea”, dijo Diego Armando Maradona.
“Para mí, para lo único que sirve esa declaración de Lio es para tapar todos los desastres que hay en el fútbol argentino. Le hacen poner la cara al pibe para tapar los desastres que hicieron en AFA y para que hoy estemos hablando de él y no de ellos. Y para tapar, también, que perdimos dos finales consecutivas con Chile. Que, con todo el respeto del mundo, no es Holanda del ‘74. Y las perdimos, las dos. La verdad, a esta altura no le creo a nadie. Tengo la sensación de que lo mandaron: ‘Andá y decí algo para salvarnos’. Fuimos un desastre y lo dejaron solo”.
Maradona estalló después de ver, en vivo y en directo, el final de un nuevo capítulo del reality show en que se ha convertido la Asociación del Fútbol Argentino y apenas escucha la respuesta de Daniel Angelici, presidente de Boca, cuando le preguntan quién es, hoy por hoy, el presidente de la AFA: “No se”, dice.
“Yo tampoco se quién es el presidente de la AFA, pero sí sé que no puede ser ninguno de los que apoyó a Grondona hasta el último día. Esta es la bomba de tiempo que él les dejó activada y ahora les explotó en las manos. ‘¿Vos viste lo que vi yo?’ Se reunieron en una concesionaria de autos y en menos de lo que duró la misa que yo hice por mi vieja y mi viejo resolvieron el futuro del fútbol argentino. Me da mucha pena y bronca lo que está pasando. ¿Para esto hicimos tantos goles? ¿Para esto nos bancamos las patadas?. Tocamos fondo”, agregó.
El tema de la sucesión política, de la situación institucional, parece dejar en un segundo plano, para él, la renuncia de Messi. Pero no.
Y agregó: “Messi tiene que seguir en la Selección, ¡tiene que seguir! Tiene que seguir porque tiene cuerda para rato, porque va a llegar a Rusia en condiciones de ser campeón del mundo. Se tiene que apoyar más en los muchachos que lo pueden ayudar a llevar al equipo para adelante y menos en los que le dicen que se tiene que ir. ¡Sáquenle de al lado a los que no lo dejan ni llorar! No juegan y no lo dejan ni llorar. Porque los que le dicen que se tiene que ir, lo hacen para que no veamos el desastre que es el fútbol argentino”.
Con estas palabras, Diego bajó los decibeles para con La Pulga, a quien criticó que le fatba personalidad