El tucumano Nicolás Sánchez, una de las estrellas de la Selección argentina en el Mundial de rugby, donde los Pumas juegan el domingo una de las semifinales contra Australia, siente admiración por el inglés Jonny Wilkinson, al que considera el mejor jugador de la historia y con el que aprendió en Toulon.
El apertura inglés siguió ayudando en el staff técnico del Toulon, tras su retiro, y coincidió con la llegada al club francés de Nicolas Sánchez y de Juani Hernández, dos jugadores argentinos que ocupan el mismo puesto.
“Si hay que nombrar el mejor jugador de la historia es Wilkinson, es una leyenda. Tenerlo al lado en Toulon fue espectacular, aproveché lo máximo estar con él. Fue un gran recuerdo estar a su lado”, afirmó ayer el apertura argentino respecto al inglés.
“Con Wilkinson trabajamos la patada. Es un detallista en todo lo que hace. Con Juani Hernández trabajábamos con él la posición del cuerpo, el impacto a la pelota. Y nos decía que lo que tiene que tener un pateador es la mentalidad”, añade Sánchez.
En la temporada que estuvo Nico Sánchez en Toulon, coincidió con otro gran apertura, el australiano Matt Giteau, con el que se verá las caras el domingo en la semifinal de Twickenham.
"No coincidí mucho con él porque estaba lesionado. Va a ser un desafío grande jugar contra él", explica el tucumano de 26 años.
En la selección argentina, Sánchez, desde su posición de apertura, lleva 74 puntos en el Mundial, ocupando la segunda posición entre los goleadores, detrás del escocés Greig Laidlaw, que lleva 79, pero cuyo equipo ya está eliminado, por lo que el tucumano tiene posibilidades de terminar primero.
"Es algo lindo, lo vivo de una forma tranquila. Pienso más en el equipo que en mí personalmente", dice.
Sánchez ha desplazado en los Pumas del puesto de apertura a Juan Martín Hernández, que ocupa la posición de centro.
Aporte de Hernández
“Juan aporta muchísimo al equipo. Es una de las piezas fundamentales. Te da muchísimas salidas y organiza mucho. Tener un segundo lanzador es importantísimo y facilita las cosas”, indica.
Los jugadores argentinos saben que ganarle a Australia en semifinales, será difícil.
“Estamos contentos por estar en semifinales, pero ya pasó, hay que pasar página y estamos pensando en Australia, que es un desafío enorme para nosotros. Sabemos que para ganarle, tenemos que jugarle mejor que contra Irlanda en cuartos. Tendremos un desafío físico que no tuvimos contra Irlanda”, afirma
“Contra Australia hay que seguir manteniendo la pelota y seguir buscando los espacios. Un punto importante va a ser no conceder penales, porque son muy fuertes en mauls y en los lines”, explica.
“En ese partido contra Australia, lo ideal para mí sería tener un cien por cien de efectividad, ya que el partido se puede definir en uno o dos puntos. Es importante tener certeza y creer en lo que uno hace”, añade.
Hace un año, Argentina logró su primer triunfo en el Rugby Championship contra Australia en Mendoza (21-17), en cambio, hace dos meses perdió ante el mismo rival y en el mismo escenario por 34-9.
"La diferencia del triunfo contra Australia hace un año y la derrota en este fue la disciplina. Hace un año, ellos se quedaron dos veces con un jugador menos y cometieron muchos penales. En éste fuimos nosotros los que cometimos muchos penales", señala.
Nico Sánchez afirma que los jóvenes escuchan a los cinco veteranos entre los Pumas que fueron semifinalistas hace ocho años en Francia 2007.
“Los que estuvieron en 2007 tienen muy buen recuerdo. Lo que más transmiten es serenidad. Contra Irlanda, cuando nos sacan amarilla, vuelve Herrera, hay un penal de nuevo y podría haber habido otra amarilla, Corcho (Fernández Lobbe) nos dijo, tranquilos, que todo va a salir bien. La tranquilidad de ellos es importante”, concluye.
