Cuando se habla de famosos se piensa que ellos, sus hijos y sus nietos tienen la vida asegurada. Dinero con el que podrían pasarla bien sin tener que esforzarse demasiado. Sin embargo hay estrellas a las que no les gusta legar su fortuna, al menos no a sus hijos. Ellos los desheredaron. ¿Una lección demasiado severa? Sus casos:
Sting. Es multimillonario, tiene seis hijos pero no les dejará demasiado. "No quiero dejarles una fortuna. Tienen que trabajar. Obviamente les prestaría ayuda si me la pidieran, pero ellos ya saben que las cosas importantes son las que obtienen por sus propios méritos", le dijo Sting tiempo atrás al Daily Mail. Y agregó: "Además, ya saben que va a quedar poco. Últimamente tenemos muchos gastos".
Su patrimonio es de 300 millones de dólares y trabajan para él 100 personas.
Los Spelling: Aaron Spelling es un famoso productor de televisión, padre de Tori, actriz. Murió en el 2006 y dejó una fortuna de nada menos que 500 millones de dólares. Su hija sólo cobró uno y luchó contra su madre quien se habría quedado con todo.
Los Hilton. El abuelo de Paris, Barron Hilton, dejó a su nieta sin un dólar de su inmensa herencia por su comportamiento. La mayor parte de su fortuna irá a obras de caridad.
Ted Turner. El fundador de la cadena CNN quiere que sus cinco hijos se sacrifiquen como él. Por eso no les dejará todo. Tiene nada menos que 30 mil mollones de dólares que irán a parar a Naciones Unidas.
Bill Gates. Otro magnate que no le dejará toda su fortuna a sus hijos. Ellos tendrán sólo 10 millones cada uno. El resto será para beneficencia.