Trabajadores y empleados de la administración española en Argentina cumplen hoy la cuarta jornada de un paro por tiempo indeterminado en demanda de una recomposición salarial dado que, según aseguran, no se les aumenta el sueldo desde hace ocho años.
Al igual que en las tres jornadas anteriores, los trabajadores se concentraron a las 9 de la mañana en las puertas del Consulado español de Buenos Aires, en el barrio de Recoleta, para reclamar una solución a la creciente pérdida de poder adquisitivo.
Consultados sobre el estado de la negociación, voceros de los trabajadores señalaron que, pese a contar con la representación de las principales centrales sindicales ibéricas, aún no se abrió un diálogo formal con el Estado español para resolver el reclamo.
En su página web, el Consulado en Buenos Aires indica hoy que "ante la situación derivada de la huelga del personal de este Consulado General convocada con carácter indefinido a partir del lunes 29 de mayo, se ruega disculpen las limitaciones e inconvenientes que puedan producirse".
"Una vez que la huelga sea desconvocada se hará saber con un nuevo aviso", agregó el consulado.
El paro, que según los huelguistas se cumple con un 95% de adhesión, paraliza desde el lunes la Embajada, los Consulados de Buenos Aires, Mendoza, Córdoba, Rosario y Bahía Blanca, consejerías como la de Empleo y la Cultural, y el Centro Cultural de España en Buenos Aires.
La medida ya ha comenzado a afectar el funcionamiento administrativo de las oficinas que atienden unos 450.000 ciudadanos españoles residentes en el país y turistas que visitan la Argentina, dijeron los trabajadores.
Durante los últimos días, los huelguistas recibieron el respaldo de los trabajadores de las delegaciones diplomáticas españolas de Australia, Estados Unidos, Finlandia, Venezuela, Ecuador, Marruecos, Emiratos Árabes, Guinea Ecuatorial y Alemania.
La medida amenaza con extenderse a sedes diplomáticas españolas en otros país.
El martes pasado, en Berlín, los empleados de la administración española se movilizaron con un reclamo similar al que se hace en nuestro país.
En tanto, y como ordena la ley de España, las oficinas de Canadá, Australia y Finlandia, ya informaron sobre futuros ceses de tareas, algunos totales y otros parciales, para los próximos meses.
La medida de fuerza en nuestro país ocurre en los días previos a la partida del embajador de España, Estanislao de Grandes Pascual, que abandonará ese puesto diplomático la próxima semana cuando venzan sus cartas credenciales.
Por ello, los trabajadores tienen previsto movilizarse el lunes que viene a las 12 del mediodía, esta vez a la embajada de España, para ratificar el reclamo.
Los empleados de la administración española en nuestro país citan un informe de la consultora Mercer según la cual Buenos Aires se ha convertido en la ciudad más cara de Sudamérica y ocupa el puesto 41º a nivel mundial, por encima de algunas de las principales ciudades europeas como París (44º) y Milán (50º), y muy por encima de Madrid (105º) y Barcelona (110º).