Una victoria sudada y un empate sufrido: la selección brasileña, anfitriona del Mundial 2014, no ha mostrado aún la potencia y equilibrio de otrora, y aumenta cada vez más su dependencia en su astro Neymar. Brasil y México sellaron un empate sin goles el martes en Fortaleza y ambas suman cuatro puntos en el grupo A con los locales en la punta por diferencia de goles. La situación de la seleçao de Luiz Felipe Scolari no es desastrosa, una derrota sí hubiera colocado las cosas cuesta arriba, pero con un empate ante Camerún en la tercera fecha avanzaría a la siguiente fase. ¿Qué le pasó a Brasil?
“Tenía al frente un equipo bueno”, respondió cortante Felipao en la rueda de prensa. “Tenemos la manía de creer, nosotros los brasileños que los otros no juegan nada” y México “jugó con calidad, salió y sabe jugar contra nosotros”, siguió.
No en vano es considerada la piedra en el zapato de los brasileños. Es la primera vez desde 1978 que Brasil no llega al tercer juego de la primera fase con dos victorias. Fue además el primer empate entre ambos después de tres contundentes victorias canarinhas en Copas del Mundo. Algo debe estar haciendo bien el entrenador Miguel ‘Piojo’ Herrera.
Neymar & Co
Scolari lo niega, pero Brasil depende de Neymar, la principal referencia en el ataque de los amarelinhos. México supo marcar al 10 de la seleçao, que se echó el equipo al hombro, pues Oscar, el cerebro de la creación, estuvo demasiado apagado; los laterales Marcelo y Dani Alves asfixiados por los volantes mexicanos; Ramires, la opción y recambio habitual de Hulk en la derecha rindió casi nada; y Fred, el hombre gol, se quedó de nuevo sin tocar el balón, tal cual le pasó en el debut ante Croacia.
No quedaba otra que apelar al genio individual del atacante del Barcelona, que en el chance más claro de gol, se topó con una pared aún mayor: Guillermo Ochoa. Una espectacular a un centro de Dani Alves que Neymar cabeceó con potencia, pero ‘Memo’ entró en el camino del balón y lo sacó con un manotazo a milímetros de la línea. Era la noche de Ochoa, no de Neymar. “Él no gana ni pierde solo, forma parte de un grupo, tiene un potencial a veces superior al de los otros y todo el mundo lo sabe, los jugadores lo saben. Vamos a hacer un trabajo para que tengamos oportunidades de ganar con o sin Neymar, con él más o menos marcado”, redondeó Scolari tras recibir algunas críticas de la prensa de su país.
¿Brasil sin Neymar? Impensable, solamente si ante Camerún recibe una tarjeta amarilla, que lo obligaría a perderse el partido de octavos de final contra el primero o segundo del grupo B, que podrían ser Holanda o Chile, equipos nada sencillos de vencer.
Cambios
Está claro que Neymar -el ‘Garoto’ de la técnica insolente, capaz de desequilibrar a cualquiera- estará siempre en los 11 de Scolari. Los otros 10 siempre pueden cambiar. De hecho el propio entrenador brasileño aseguró en más de una oportunidad que el equipo había evolucionado un “10 por ciento” en relación al debut contra Croacia, que terminó con una victoria sufrida por 3-1, con una ayudita en el segundo tanto cuando Fred cayó en el área y se sancionó un penal cuestionado que después cambió por gol la nueva figurita de la Seleçao.
¿Confianza en sus jugadores? “Ya dije 10 veces que son ustedes los que piensan en A, B, C o D. Yo monto mi equipo, si clasifica o no es asunto mío” prosiguió el técnico, que adelantó que podría hacer uno o dos cambios ante el combinado africano.
Brasil quiere ver ese equipo aplanador que venció invicto la Copa Confederaciones hace un año y ganó de nuevo la confianza del torcedor, que el martes llegó a ser opacado por una ruidosa hinchada mexicana, que siendo minoría se hicieron sentir desde el himno, cantado a todo gañote, hasta el “Ay ay ay... Canta y no llores” del tradicional “Cielito Lindo”. Fue empate con gusto a victoria. México quería sumar puntos y se fue con uno.
“Demostramos que el equipo está para jugar de tú a tú a quien sea” dijo el DT del Tricolor..
Felipao afronta la Copa como una escalera, sólo que los peldaños se complican. Si consiguiera superar los octavos, los rivales serían igualmente complicados, incluyendo a uno del llamado Grupo de la Muerte (Italia, Uruguay, Inglaterra y Costa Rica) o a Colombia, que arrancó inspirada.
“Un escalón a la vez”, dice Scolari... Sólo que con el equipo en los hombros, Neymar podría perder en cualquier momento el equilibrio. Por ahora todo marcha, en cuanto a los números, de la mejor manera, pero tanto en el seno del plantel como puertas afuera, saben que la “Neymardependencia” no será suficiente.
La prensa brasileña fue muy crítica con su seleçao
Los medios gráficos de Brasil se repartieron los titulares entre la decepción por el empate de su Selección sin goles ante México y la gran actuación del arquero Guillermo Ochoa.
El diario O Dia publicó una foto de Neymar entre la red del arco y tituló: “Empate enrrolla a Brasil”. La bajada dice: “Brasil no jugó el partido de los sueños, pero creó varias situaciones de gol y se despierta una luz de alerta para la clasificación a los octavos de final”. El Expresso, sensacionalista de Río de Janeiro, aseguró: “Es para llorar”. El deportivo Lance, en tanto, colocó en tapa la foto de Ochoa estirándose para sacarle un cabezazo a Neymar con la frase “No contaban con mi astucia”. Mientras, el diario Hora Media prefirió otro enfoque y subrayó: “Sin Hulk el juego de Brasil fue malo”.
Folha de Sao Pablo se preguntó “¿Será que da?” y explicó: “Brasil jugó mal, tuvo el peor inicio desde 1978 (Mundial de Argentina) y genera dudas sobre su capacidad de encarar a los grandes de la Copa”. Por último, O Estado coincidió que “Brasil jugó mal, pasó susto y empató 0-0 con México”.