El Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) sumó 1.154.000 votos en todo el país. Más de 400 mil de esos votos le correspondieron a la lista bonaerense que encabezó Néstor Pitrola.
Cordobés ("dejé Córdoba el 24 de marzo de 1976 para esconderme en Buenos Aires; era delegado gremial bancario"), siempre militó en el Partido Obrero y ocupará desde diciembre una de las tres bancas del FIT en el Congreso junto al mendocino Nicolás del Caño y el salteño Pablo López.
Pitrola dice que sumarán casi 40 bancas entre diputados nacionales, legisladores provinciales y concejales en todo el país.
"No hay antecedente en la historia argentina del desarrollo político de la izquierda", afirmó en charla con Los Andes. Además, promete que se quedará sólo con un cuarto de la dieta de diputado y que el resto la destinará a su partido, que se alternará en el cargo con quienes lo secundaron en la lista (un año cada uno) y que no nombrará familiares en el Parlamento.
-¿A qué adjudica la gran elección del FIT?
-Advertimos un fenómeno de tipo nacional. El FIT hizo elecciones extraordinarias en muchas provincias. Desde Salta y Jujuy donde sacamos el 8%, hasta el 11% del Partido Obrero en Santa Cruz, 8 % el de Río Negro, 10% en Neuquén. En la Patagonia no había posibilidades de sacar un diputado y la gente votó un programa. Se votó una agenda, un planteo frente a la crisis. Mendoza es una expresión de esto.
En Córdoba, donde nos han robado una banca, sacamos el 12,5% en la capital y un 8% a nivel provincial. En la Capital Federal sacamos un 10% pero una división del voto con Luis Zamora dejó a (Jorge) Altamira a muy poco. En la provincia de Buenos Aires le ganamos a Francisco De Narváez en todo el cordón del conurbano que es la gran concentración obrera y urbana del país. El movimiento obrero y la juventud nos votaron. Ese el eje del voto.
-¿Cuál es el planteo frente a la crisis que propuso el FIT?
-Hemos presentado una agenda de los trabajadores. El 82% móvil y la devolución de la Anses a los trabajadores para sacar las garras del tesoro público y para que se paguen los juicios. El sistema jubilatorio está siendo usado para pagar la deuda externa.
Ya tenemos un proyecto de ley que hicimos con Altamira y será el primero que presentaremos en la Cámara. También vamos por la abolición del impuesto de las Ganancias a los salarios, que también está plasmado en un proyecto de ley. La oposición planteó subir el mínimo no imponible. Cristina lo retocó. Nosotros creemos que los salarios no deben pagar ganancias.
-¿Aún los salarios altos?
-Nosotros dejamos gravados a los directivos empresarios, por su condición, con piso de mínimo de 25 mil pesos, que para nosotros significan tres canastas familiares. Esto será el primer paso de una reorganización impositiva que hoy tiene un carácter muy regresivo. Otra iniciativa es el pase a planta de todos los trabajadores tercerizados. Nosotros queremos liquidar el fenómeno. También iremos por un salario mínimo que cubra la canasta familiar.
Son demandas que integran un programa de salida de la crisis. La salida que discuten los demás partidos es una salida con ajuste, vía devaluación, desdoblamiento cambiario, tarifazo de los servicios públicos. El voto del FIT fue contra el ajuste que está haciendo el gobierno y que también propone el resto de la oposición.
-¿Qué hechos favorecieron el crecimiento del FIT?
-Una fue el conflicto por la resolución 125, en el que otras izquierdas se asimilaron a la Mesa de Enlace y nosotros fuimos independientes tanto del Gobierno como de la patronal agraria. Después estuvimos en diferentes luchas obreras y en el pedido de cárcel a Pedraza.
Pero lo más importante fue que nosotros refutamos durante diez años al kirchnerismo en todos los aspectos de su relato como un régimen político que rescató la deuda externa, las privatizaciones y el régimen de flexibilidad laboral.
-¿Pero no hubiesen votado algunas de las leyes clave del kirchnerismo?
-En la votación de la 125 nos hubiésemos abstenido. Hubiésemos votado contra la reestatización de YPF porque sabíamos que era para hacer negocios con capitales extranjeros como Chevron y lo dijimos oportunamente.
La única ley que hubiésemos votado a favor fue la estatización de las AFJP, aunque adelantamos que iban a usar el dinero para pagar la deuda. Somos partidarios de la nacionalización de todos los recursos naturales. Las estatizaciones de (Florencio) Randazzo y de Mariano Recalde (por Aerolíneas Argentinas) son un negociado capitalista.
-¿Qué opina de la actual situación del PJ?
- El peronismo como movimiento de transformación social no existe más. El FIT aspira a la construcción de un nuevo movimiento popular. El peronismo ya no puede concretar sus propias premisas de justicia social y autonomía nacional. Es un movimiento en completa descomposición. El kirchnerismo fue una gran tentativa de superar la crisis del peronismo.
Y ahora la crisis K reabre el panorama que había en el peronismo en 2001. Néstor Kirchner vio la descomposición del peronismo. Intentó un partido transversal, luego la Concertación Plural, después los Unidos y Organizados, e inventó la reforma política para salvar al PJ. La disgregación del PJ es un problema de fondo, no se arregla con una ley.
-El PD hizo una elección muy mala en Mendoza. Algunos dirigentes le apuntaron al FIT por la pérdida de votos…
-Eso es absurdo, es esquizofrénico. Un votante del PD jamás votaría a la izquierda anticapitalista. Yo asimilo la situación del PD a la del Partido Renovador de Salta. Los partidos conservadores están todos en retirada. El PD responde a esta realidad. Pero desde un punto de vista general la derecha no levanta cabeza en la Argentina. Para obtener votos debe ir disfrazada de otra cosa. Al macrismo lo debieron disfrazar en la lista del Frente Renovador en la provincia de Buenos Aires. Macri es un fenómeno porteño que no logra proyección nacional…
-¿Y Sergio Massa?
-Es de derecha pero el electorado lo ve como un post-kirchnerista, como la superación del kirchnerismo. Fue un canal para ganarle a Cristina como lo fueron Julio Cobos, Hermes Binner o Juan Schiaretti. Lo importante acá es que esta transición va a poner a pruebas a todos. Vamos a un Parlamento muy diverso con una oposición fragmentada y el FIT entra en la discusión política.
-¿El FIT no fue un canal para castigar al Gobierno también?
-El voto al FIT es un voto consciente a una corriente luchadora, anticapitalista, socialista y a un programa y un espacio que se va a constituir en una alternativa política. Es lo contrario del voto útil.
-¿De dónde salieron los votos mendocinos al FIT?
-Nos votaron los desencantados del kirchnerismo básicamente. Los jóvenes y los trabajadores.
-¿Imagina cómo se desempeñaría un intendente del PO en el actual sistema político argentino?
- Abriríamos las cuentas de la Municipalidad, haríamos asambleas populares, peticionaríamos junto a la comunidad los recursos que son necesarios.
Veremos qué pasa en Salta. Pensamos controlar incluso el Concejo Deliberante de la capital salteña. Nosotros tenemos vocación de poder para cambiar la realidad a favor de los trabajadores.
Néstor Pitrola: "A nosotros nos votaron los desencantados del kirchnerismo”
Es uno de los tres legisladores que tendrá la izquierda dura en el Congreso. Asegura que el gran logro del FIT fue haber refutado durante diez años “el relato kirchnerista” y que el peronismo como movimiento de transformación social no existe más. “Es abs
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