La final por el campeonato de la NBA se torna cada vez más incandescente luego de que el campeón Heat arrollara al retador Spurs en el cuarto partido de tal forma que mientras Miami entera respira aliviada, la urbe de San Antonio amaneció gris y preocupada.
La noche del jueves el Heat peleó con la espalda contra la pared para doblegar 109-93 a San Antonio y empatar a dos triunfos por bando la serie por el título. Y hoy, a partir de las 21 (por ESPN) ambos equipos volverán a enfrentarse en la misma arena ATT Center de San Antonio, para mudarse después a Miami donde se jugará el sexto partido el martes y el séptimo el jueves, si hiciera falta.
“Físicamente me siento bien, impecable, mejor que en toda la temporada. Pero la verdad es que estoy frágil de confianza, me falta anotar, marcar más”, contó en la previa el bahiense Manu Ginóbili, sobre quien el Alcalde de San Antonio, Julián Castro, dijo: “Manu es uno de los jugadores más queridos de la historia de los Spurs y con buena razón porque además de su juego extraordinario es latino como la mayoría de los residentes de la ciudad”.
De uno y otro. San Antonio se sumó a la lista de interesados en el pivot de LA Lakers Dwight Howard. Por el lado del Heat, Chris Bosh fue multado con 5.000 dólares por simular una caída en el cuarto partido de la final que quedó en manos de Miami.