Nazarena Vélez contó que se autoflageló

La productora comentó que no está con nadie y se despachó con una impactante confesión referida a la Navidad y a su hijo.

Nazarena Vélez contó que se autoflageló
Nazarena Vélez contó que se autoflageló

¿Hace falta decirlo todo? Para Nazarena Vélez evidentemente sí. La productora no demoró en hablar sobre el supuesto amor con el que la vinculaban y se despachó con una impactante confesión. Dijo que se autoflageló en un auto cuando armó el pinito de Navidad con su hijo.

Arrancamos con el supuesto romance con Marcelo Consentino, el director de Leonas. Este caballero publicó sin dramas en Twitter: "Te amo y te voy esperar @veleznazarena". Nazarena se sentó con los Intrusos y le contestó.

“Él me lo dijo en forma privada y me dijo que me iba a esperar todo el tiempo que fuera necesario. Tengo una amistad con él, lo quiero mucho, es un gran tipo, es un hombre con unos huevos bastante interesantes porque no sabía que se iba a animar a poner una cosa así”, inició ella.

“La verdad que lo felicito y él me dijo ‘es la única manera de que me dejen de preguntar qué me pasa con vos. Lo que me pasa es que estoy enamorado y te voy a esperar’. Yo lo respeto porque ya me lo dijo en privado y no me molesta en lo más mínimo. Yo se lo conté a Barbie (Vélez), él se lo dijo a mi hermano y no me molesta. Sí las especulaciones y que digan que es una movida de prensa”, completó Naza.

Sobre los hombres aclaró: “No estoy resentida con los hombres, pero estoy en guardia. Tengo un miedo… Cuando Marcelo me habló de amor, le dije ‘correte, no te voy a lastimar, acá no vas a tocar una teta, retirate’. Yo le digo que es mentira, uno no se puede enamorar de una persona a la que no le dio un beso”.

Pero lo peor fue cuando dijo que se pegó para aliviar el dolor de su alma. “Habíamos armado un arbolito en el pino de mi casa y ahí puse todos los regalitos de Titi. Thiago empezó a abrir los regalos y, en una, me mira y me dice ‘Papá Noel los tira desde el cielo, ¿y si no fue Papá Noel y fue papá?’. Me metí en la camioneta con música muy fuerte. Empecé a llorar y no me di cuenta que me estaba golpeando (las piernas) y decía ‘Fabián, ¡¿por qué hiciste esto?!’. No está bueno, es muy fuerte el dolor de ver a un hijo sufrir y la verdad es que la estoy pasando mal”.

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