Brilló como conductora de la ceremonia de los Premios Platino al cine iberoamericano que tuvo lugar en su natal Uruguay y, si bien ella no estaba nominada en ningún rubro, fue la figura más buscada por la prensa internacional en el hotel de Punta del Este donde se alojaba.
Los motivos: la película sobre la cantante de cumbia Gilda, titulada “No me arrepiento de este amor” y cuyo estreno se anuncia para el 15 de setiembre (ocho días después del trágico accidente en la ruta que, en 1996, le costó la vida a la autora de “Fuiste” junto a su madre y su hija mayor) y también el documental “Nuestra Natasha”, que dirigió Martín Sastre para registrar el furor del pueblo ruso durante una gira de Oreiro por 16 ciudades de ese país en 2015.
“No es estrictamente un documental sobre mi vida -dice Natalia- aunque los momentos de la gira rusa se van mechando con toques biográficos. Yo particularmente no creo que haya algo en mi vida digno de ser contado. La idea fue de Martín, que es muy arriesgado. Yo no lo hubiera hecho porque no me gusta mostrar mi intimidad. Además no sé si a alguien le puede interesar”.
-Pero cuando lo presentaste en el Festival de Moscú, ¿cómo fue recibido?
-Fue un éxito tremendo. El documental se pregunta cómo relacionar a una chica de Uruguay y a una que nació en Siberia. Si existen otras vidas, yo debí haber sido rusa. Es raro ir a Siberia y que te esperen miles de personas bajo la nieve cantando “Soy del río de la Plata” en español.
-¿Y vos hablás ruso?
-Me defiendo bastante, pero a partir de setiembre voy a empezar a tomar clases con una chica rusa que se va a quedar a vivir en mi casa por un año para perfeccionarme. Hace 20 años que viajo a ese país y se ha creado un amor mutuo que es difícil de explicar. Ya se están vendiendo entradas para la próxima gira que está programada para diciembre por Moscú, San Petersburgo y otras ciudades.
Aunque consiguió distribución internacional, el documental “Nuestra Natasha” aún no tiene fecha de estreno en la Argentina porque la idea es no superponerlo con el de “No me arrepiento de este amor”, la película sobre la cantante Gilda que sí tiene fecha prevista para el 15 de setiembre.
Según Natalia, estos dos proyectos en los que está embarcada en este 2016 “tocan aspectos íntimos de mi persona. Porque en uno se muestran momentos con mi hijo (Merlín Atahualpa, hoy de 4 años), con mi marido (RIcardo Mollo) y con mis padres; y en el otro represento a una cantante de la que siempre fui fan confesa”.
La película sobre Gilda, que dirige Lorena Muñoz, “toca la parte musical pero también la parte personal”, sostiene Oreiro, para quien “fue una responsabilidad muy grande interpretarla, porque para mucha gente lo que se va a mostrar va a ser la realidad de lo que fue Gilda”.
Por otra parte, al estreno de “No me arrepiento de este amor” se sumará la salida de un disco homenaje grabado con versiones y reversiones cantadas por la propia Oreiro y con los mismísimos músicos de Gilda (Danny de la Cruz, Edwin Manrique y Manuel Vásquez), quienes fueron convocados como consultores pero terminaron quedándose en la película, donde vuelven a ser los músicos de Gilda pero ahora en la ficción.
“Es una película muy emotiva -sigue Natalia, también productora del film-. Ojalá que la gente quede contenta, porque la idea era crear un hecho cinematográfico, no una película ‘hitera’. Fuimos muy cuidadosos con el guión y el concepto de la película para que la gente de otros países también la disfrute aunque no sepa quién fue Gilda”.
Oreiro explica además que su intención al abordar el personaje de Gilda no fue imitarla (“aunque estoy igual”) sino “poder transmitirle a la gente su energía”.
“Trabajé mucho para cantar igual que cantaba ella. Hasta cambié mi forma de bailar, porque ella era más tranquila y yo muevo mucho las caderas. También usé ropa y accesorios de ella, como si fueran amuletos durante todo el rodaje”, contó.
En el elenco también figuran Ángela Torres (sobrina de Diego y nieta de Lolita Torres) interpretando a Gilda a los 15 años, Lautaro Delgado (el marido de Gilda en la ficción), Javier Drolas (su manager), Susana Pampín (la madre de Gilda), Roly Serrano y Daniel Melingo, entre otros.
La directora
La realizadora de “No me arrepiento de este amor”, Lorena Muñoz, debutó en el largometraje en 2003 con el documental “Yo no sé qué me han hecho tus ojos” sobre la cancionista de tangos Ada Falcón y hecho en conjunto con el cineasta y crítico Sergio Woolf.
En 2006 volvió al documental con “Los próximos pasados”, una película que recorre la historia del legendario mural que el artista mexicano David Alfaro Siqueiros pintó en un sótano de la quinta del empresario periodístico Natalio Botana en los años 30 y que, luego de agonizar durante años en un depósito, fue restaurado y desde 2009 se ubica en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada.
La película sobre Gilda es su primera incursión en la ficción, aunque vuelve a tratar sobre un personaje real y sobre el que realizó un extenso trabajo de investigación que incluyó charlas con familiares, amigos, fanáticos y la suerte de convencer a Fabricio Magnín (35), hijo de Gilda, para que cediera los derechos para la producción.
-Prácticamente es como si siguieras haciendo cine documental.
-Sí, porque soy una obsesiva de los datos y de la búsqueda de información. Con Gilda quería ser lo más precisa posible, aunque de hecho tenía en cuenta que estaba ficcionando su vida.
-En la película utilizás varias de las canciones más conocidas de Gilda, pero cantadas por Natalia Oreiro.
-Sí, creo que es lo que correspondía, que cantara la misma Natalia con el estilo de Gilda, lo que refuerza la ficción. De todos modos, intenté que todas las canciones que aparecen en la película tuvieran una función dramática en la historia. Casi todos son hits, pero que sirven para hacer avanzar el relato.