La actriz
Nastassja Kinski
acusa a su padre, el actor alemán Kinski, de haber sido "un tirano que intentó abusar de ella y al que mandaría a la cárcel si estuviera vivo ", declaración que sigue a la de su hermanastra
Pola
,
que el miércoles reveló que fue violada durante años por su padre
.
"Era un tirano. Apenas puedo recordar que nos hayamos sentado juntos en la misma mesa", asegura Nastassja Kinski, de 51 años, en una entrevista del dominical alemán Bild am Sonntag.
Si hubiera podido hoy en día, haría "todo lo posible para que fuera a la cárcel". "Cuando murió, algunas personas me dijeron que lo sentían. Yo, no", añade.
Transcurridos 22 años desde la muerte del actor oriundo de Danzig, leyenda torturada del cine, su hija mayor, Pola, reveló esta semana que su padre la violó durante años.
En un libro publicado en Alemania, esta actriz teatral de 60 años cuenta el calvario que sufrió entre los 5 y los 19 años, una tragedia nunca había contado a su hermana.
Nastassja explica en Bild am Sonntag que
Klaus Kinski
no abusó de ella pero "lo intentó siempre". "Siempre me tocó demasiado, me atraía tanto contra él que pensaba que nunca podría librarme. Entonces tenía 4 ó 5 años y vivíamos en Múnich", cuenta.
"Sentí de forma instintiva que no se trataba del abrazo de un padre amante sino de algo más. Pero conseguí escapar de sus abrazos. Luego temblaba cuando estaba él", detalla la actriz, conocida por sus interpretaciones en "Tess" de Roman Polanski y "Paris Texas" de Wim Wenders.
"Era tan imprevisible que aterrorizó siempre a nuestra familia", prosigue. "Nunca podíamos prever cuándo estallaría de cólera de nuevo. A veces, por oscuras razones, tiraba contra las paredes todo lo que caía en sus manos y gritaba tan fuerte que to estaba aterrada cada vez".
"Nuestro padre nunca nos preguntó cómo estábamos, si teníamos calor o frío o si éramos felices", asegura.
Personaje caristámico conocido por su intensa mirada y sus ojos desorbitados, Klaus Kinski, fallecido en 1991 con 65 años, está considerado un genio de la interpretación sobre todo en las películas dirigidas por el alemán Werner Herzog, entre las que destacan "Aguirre, la cólera de Dios" y "Fitzcarraldo".