Ricardo Centurión es un jugador provocador y Nahitan Nández es un futbolista temperamental, por esa razón es que sus personalidades no son compatibles si son rivales.
Cuando Racing ganaba 2-0 el volante de Racing simuló una infracción y eso provocó que el uruguayo protestara con vehemencia y fuera amonestado por el árbitro Darío Herrera.
Lejos de calmarse, Nández le gritó a Centurión "vendehumo", mientras "Ricky" lo miraba de forma sobradora.