El tenista Rafael Nadal, icono del deporte español, aseguró hoy sentir "ganas de llorar" por la crisis que se vive en España y Cataluña y afirmó que siguió los sucesos del domingo con "el corazón encogido".
"Me dan ganas de llorar cuando veo que un país en el que hemos sabido convivir y ser un buen ejemplo para el resto del mundo llega a una situación como esta", dijo Nadal en una rueda de prensa antes de su participación en el torneo de Pekín.
"La imagen que hemos presentado al mundo es negativa", señaló el ganador de 16 títulos de Grand Slam. "Es un momento triste, he estado todo el día con el corazón encogido", continuó. "Ver la sociedad en general tan radicalizada, no solo a los catalanes, me sorprende y decepciona".
España vivió el domingo una de las jornadas más tensas de su historia reciente. El reférendum independentista desarrollado en Cataluña, considerado ilegal por el Gobierno y la Justicia españoles, así como la represión policial dieron forma a un escenario de caos.
Nadal se ha mostrado contrario a la realización del referéndum del 1 de octubre al afirmar en ocasiones anteriores que no entiende una España sin Cataluña. El tenista nació y vive en Manacor, aunque se ha mostrado muy cercano a Cataluña a lo largo de su vida. En la isla de Mallorca, de hecho, se habla un dialecto del catalán y además uno de sus principales patrocinadores es un banco de Cataluña.
El número uno del tenis pidió a las partes que dialoguen e intenten alcanzar una solución. "Aunque haya momentos en que todo parezca imposible, que no hay arreglo, ése es muy simple: querer arreglarlo", afirmó en Pekín.
"La única manera es hablarlo, hablar entre las partes en conflicto, intentar llegar a acuerdos, a puntos de encuentro, que los hay. Al final llevamos conviviendo juntos toda la vida", señaló.
El estreno de Nadal en el torneo de la capital china, de categoría ATP 500, será ante el francés Lucas Pouille.