El español Rafael Nadal renunció hoy a jugar los torneos de tenis de Indian Wells y Miami como consecuencia de la lesión en la pierna que arrastra desde el Abierto de Australia y que le hizo perderse ya el certamen de Acapulco esta semana. "Se confirmaron mis peores presagios y al final la lesión que sufrí en el último entrenamiento en Acapulco antes de comenzar el torneo resulta ser en la misma zona que en Melbourne", dijo Nadal sobre su problema en la pierna derecha. "El objetivo ahora es recuperarme para estar a punto para la temporada de tierra batida".
"No podré jugar Indian Wells ni Miami. Si fue doloroso retirarme en Acapulco, es también doloroso no estar en la gira americana, que siempre ha sido importante", agregó el ibérico. "Os echaré de menos pero haré todo lo posible para estar de vuelta en 2019. Muchas gracias", concluyó en su mensaje en las redes sociales.
Nadal había anunciado intempestivamente su retiro del Abierto mexicano que se disputa en Acapulco unas horas antes del que sería su regreso a las canchas, aquejado por aquella lesión que lo obligó a retirarse ante el croata Marin Cilic en cuartos de final del primer Grand Slam del año.
"Sentí un pinchazo", dijo en ese momento Nadal. "Los médicos me han dicho que es imposible jugar, además de que me duele", completó.
El año pasado, tras perder la final del torneo de Shanghai con una cinta para sujetar el tendón rotuliano, Nadal renunció a Basilea, se retiró en los cuartos de final de París y se bajó también del Masters de Londres tras su primer partido.
Los dos Masters 1000 disputados en Estados Unidos serán el sexto y séptimo torneo consecutivo en el que el español no puede jugar o se tiene que retirar por lesión.
"He tenido más lesiones de las que me hubiera gustado en mi vida", había expresado a principios de semana en Acapulco. "Yo tengo una vida que seguir. Lo actual en esa vida es intentar seguir jugando y destacar en el tenis. Ante todo soy persona, no soy una máquina", dijo.