Quizá la cámara de Motorola no sea la mejor del mercado, o quizá no lo sea en el corto plazo porque -más allá de la competencia- está por aparecer un nuevo modelo por estas pampas. Quizá, insisto iPhone y Samsung Galaxy le doblen el brazo a este Moto, que no obstante, tiene lo suyo.
Pero de lo que sí se puede estar seguro es que la facilidad de uso, el procesamiento en colores de las fotos casuales, y las ecuación precio-calidad, al menos en términos fotográficos, pone a este equipo en lo más alto de la consideración del usuario más exigente. Y nadie que haya optado por este celular como compañero de viaje se sentirá decepcionado.
Ni bien se accede al equipo, notaremos que incluye un cargador súper rapido, algo que en tránsito se agradece demasiado. En menos de 30 minutos tendremos el celular con su batería a pleno.
El procesador Snapdragon 8 Gen 2, la versión más reciente de Qualcomm Technologies y la tasa de refresco de pantalla de 165 mhz, darán esa sensación de velocidad que será el gran aliado a la hora de tomar nuestras fotos y editarlas.
Su módulo de cámaras incluye un sensor principal de 50 MP con apertura f/1.8 y estabilización óptica, un gran angular de 50 MP que también puede utilizarse para fotografía macro, y un zoom 2x de 12 MP optimizado para retratos. Este zoom se destaca especialmente al realizar acercamientos en retratos sin deformar el rostro, aunque también puede ser utilizado como teleobjetivo. Además, cuenta con un sensor frontal de 60 MP.
El estabilizador es muy fácil de usar, ya que nos permite tomar nuestras imágenes con una línea que atraviesa el visor, para aquellos que son muy perfeccionistas en el enfoque.
Motorola ha añadido además nuevas funciones a la cámara principal del Edge 40 Pro, que incluyen estabilización durante la grabación de video, enfoque automático en objetos en movimiento, efecto de desenfoque de fondo (tipo bokeh pero en video) y un modo optimizado para grabar videos en condiciones de poca luz.
Todo aquel que esté de vacaciones querrá que sus fotos nocturnas sean óptimas en cualquier condición. Los monumentos apenas iluminados, los paisajes, y los retratos lucen magníficos gracias a esta combinación de sensores y procesamiento apoyado en inteligencia artificial.
Lo más disfrutable de este equipo es su facilidad a la hora de tomar selfies. Las fotos son nítidas pero a la vez limpias (algo que quizá el usuario más pro quiera evitar) con filtros que embellecen rostros pero sin hacer que los usuarios parezcan de cera.
La tecnología Quad Pixel combina cuatro píxeles en uno para ofrecer una sensibilidad 4 veces mejor en ambientes con poca luz y resultados increíbles
Otro acierto es su gran angular, que no distorsiona y nos entrega versiones fieles de grandes superficies.
Lo dicho, Moto se ha centrado en el objetivo de que cualquier usuario obtenga buenas imágenes sin hundirse en infinidad de configuraciones. Ellos le llaman “el enfoque instantáneo”, donde la nitidez de todos los píxeles, que son más numerosos que nunca, te hará disfrutar de un rendimiento preciso de la cámara con cualquier luz.
Si no es la mejor cámara del mercado, lo parece. Y hará que tus fotos en viaje impacten tras solo hacer un click.
Lo mejor: la ecuación calidad-precio y su inteligencia de procesamiento al primer click
Lo peor: en fotos panorámicas, la nitidez de los detalles no es la óptima.
Si querés leer el análisis de la cámara del Samsung Galaxy S23 Ultra hacé click acá.