Apple no inventó la rueda, pero si les das cinco minutos a su equipo de marketing te hará pensar que fueron parte del proceso. La fuerza de la compañía es tan grande que logran dominar la charla tecnológica casi por completo. Y eso pasó el lunes al final de su evento anual WWDC en California cuando el CEO de Apple, Tim Cook, pronunció la tan esperada frase “One more thing” para presentar al mundo Apple Vision Pro, sus anteojos de realidad mixta.
Dispositivos de realidad virtual, aumentada y mixta ya existen, pero hasta ahora no se había hablado de ellos con tanta contundencia.
Las Apple Vision Pro son unas gafas de realidad mixta con “computación espacial”, o mejor dicho, una PC que se mezcla con nuestra entorno.
Palabras como “revolucionarias” pero también “sobrevaloradas” se repiten entre los cientos de análisis que surgieron desde la presentación.
Por ahora solo un puñado de periodistas, expertos e influencers tecno han probado el producto de Apple. Todos han quedado maravillados con el producto -especialmente los fanáticos de Apple, conocidos como Fanboys- pero unos cuantos también han hecho cuestionamientos serios, especialmente sobre su precio desorbitado y su escasa autonomía.
Lo mejor
Apple evadió frases como “Inteligencia Artificial” o “realidad virtual” para dar paso a expresiones como “realidad mixta” y “computación espacial”.
¿Qué es la realidad mixta? Es la capacidad de interactuar con el entorno mientras se utilizan las Apple Vision Pro. Para lograr ese efecto se utiliza “computación espacial”, que es el eje de estos anteojos. Es como un lienzo donde el usuario despliega lo que hace actualmente en su teléfono, tablet o TV pero de modo más inmersivo y sin aislarlo completamente de la realidad.
Aunque está hecho de aluminio y cristal, quienes lo probaron hablaron de comodidad y ligereza ya que la batería está fuera del dispositivo para hacerlo más liviano.
Cuentan con doble pantalla micro-OLED con resolución 4K para cada ojo y poseen los chips propios de la compañía, como el M2 y el R1, que debuta en estos anteojos. También tienen la ventaja de interacción con los otros dispositivos de Apple como el iPhone o las MacBook.
Sin embargo, su conjunto de cámaras hacen la magia. Son una docena distribuida en todo el dispositivo que permiten detectar el entorno y mostrarlo cuando sea necesario. También las cámaras pueden observar el movimiento de los ojos y las manos del usuario para saber adónde quiere ir o qué acción quiere realizar en el sistema operativo, ya sea agrandar una foto, cambiar de aplicación o cerrar una pestaña del navegador.
Lo peor
El primer punto negativo de las Apple Vision Pro es el precio: 3.500 dólares. Es un valor impagable para el consumidor promedio de tecnología y ese costo recibió fuertes críticas. Sin embargo, más de un especialista ha señalado que esta primera generación no está orientada al público general sino a desarrolladores y empresas, y algunos se ilusionan señalando que cuando en los 90 salieron los primeros celulares costaban miles de dólares y con el tiempo se hicieron muy económicos.
Otra reseña negativa fue para su batería: dura dos horas y está colgada de un cable para que el usuario se la meta en un bolsillo. Más de uno se pregunta por qué Apple, rey del minimalismo, pone un cable colgando para algo que dura tan poco y obliga al usuario a vivir cerca de un enchufe.
Otro aspecto negativo es que, aunque elegante y deslumbrante, Apple Vision Pro no deja de ser como cualquier otro casco que nadie tiene ganas de aguantar por horas.
Aunque los que pudieron probarlo quedaron deslumbrados por las cámaras 3D y la capacidad de ver contenido multimedia, nadie quiere estar 8 horas diarias con ese peso en la cabeza.
La duda
Apple odia al Metaverso de Facebook, sin embargo las Apple Vision Pro parecen ideales para ese desarrollo. Sin embargo, la compañía fundada por Steve Jobs busca separarse de ese fracaso millonario que es el Metaverso para centrarse en llevar la computación espacial a nuevos niveles sin que sean 100% virtuales.
¿Apple les tiene fe a sus gafas? Dicen que sí, pero hay dudas.
La negativa del CEO Tim Cook a mostrarse usando las Apple Vision Pro es para evitar memes, pero quizá también para que su imagen no quede en la historia como la de Sergey Brin, creador de Google, con los lentes Google Glass que nunca triunfaron o como Mark Zuckerberg con las Meta Quest Pro, que aún están lejos de ser populares.
La competencia
Para intentar ganar la partida, Mark Zuckerberg presentó el 1 de junio las Meta Quest 3, las gafas que representan la evolución de la popular línea de dispositivos de realidad virtual de Meta. Con mejoras significativas en diseño, rendimiento y funcionalidad, estcasco promete ofrecer a los entusiastas de la realidad virtual una experiencia inmersiva y envolvente.
Comparadas con su predecesora, las gafas Meta Quest 2, las Meta Quest 3 son un 40% más delgadas, lo que las hace más cómodas de llevar durante largos períodos de tiempo. Se espera que utilicen el chipset Snapdragon XR2 Gen 2 de próxima generación. Las gafas Meta Quest 3 son compatibles con la biblioteca de contenido existente de Meta Quest 2. Esto significa que los usuarios pueden acceder a una amplia selección de juegos y aplicaciones de realidad virtual desde el primer día.
¿Lo más llamativo? definitivamente su precio. Meta Quest 3 se venderán por $499 para la versión de 128GB. Este precio lo convierte en una opción más accesible para los entusiastas de la realidad virtual que buscan una experiencia de alta calidad sin romper el banco. Pero es especialmente atractivo frente a las Apple Vision Pro, que siete veces más.
