Murió el motociclista embestido por un policía que conducía ebrio

Gabriel Lozano, de 33 años, había sido atropellado el último domingo.

Murió el motociclista embestido por un policía que conducía ebrio

César Gabriel Lozano, de 33 años, no superó el coma con que había llegado a la Policlínica Privada de San Rafael el domingo 2 de marzo cuando, circulando en moto, fue embestido por un auto conducido por un policía que estaba de franco y que tras el accidente intentó, sin éxito, darse a la fuga.

Según los facultativos, el hombre que estaba en terapia intensiva presentaba un fuerte traumatismo de cráneo y fractura de la cadera, se descompensó en las primeras horas de ayer y falleció poco después. Y mientras su cuerpo, a los efectos legales, fue llevado a la Morgue Judicial, la Justicia varió la calificación inicial de lesiones graves por la de averiguación de homicidio culposo.

Policía ebrio

Paralelamente a la noticia del fallecimiento de Lozano, se conoció que los análisis que se le realizaron al policía Fernando Toledano (31 años y con prestación en Infantería), dieron positivo con más de 2,5% de alcohol en sangre (cuando lo permitido es de 0,5%).

El uniformado luego del accidente intentó escapar, acción que fue impedida por los vecinos de la zona, hasta que efectivos concurrieron al lugar y lograron rescatarlo. Quedódetenido, situación que aún se mantiene tras haber declarado ante el titular de la Segunda Fiscalía Correccional, donde se instruye la causa.

El hecho

El policía, el último domingo, conduciendo un VW Cross Fox por Ejército de los Andes, en la zona conocida como Pobre Diablo, atropelló al motociclista, que circulaba por la misma calle pero en sentido contrario, tras lo cual lo arrastró varios metros hasta que se detuvo contra un poste de luz.

Y mientras algunos vecinos auxiliaban al motociclista, el policía intentó escapar por un callejón que no tiene salida, por lo que quedó a merced de la gente, que le impidió retomar su camino.

En ese momento se encontraron en el vehículo algunas botellas de bebidas alcohólicas.

La bronca de la gente se extendió por varios minutos, hasta que personal de Infantería llegó al lugar y logró rescatar el vehículo y a su conductor, en una situación donde no faltaron los insultos y algunos piedrazos contra los móviles.

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