Un generalizado pesar ha provocado el imprevisto fallecimiento del doctor Roberto Godoy Lemos, reconocido abogado penalista y especializado en temas de seguridad, quien murió el jueves pasado a consecuencia de un accidente doméstico que había sufrido en su propiedad rural, hace tres semanas.
Tenía 65 años y se encontraba en el pleno ejercicio de sus actividades profesionales y académicas. Entre las primeras llevaba varios casos, especialmente la defensa del ex legislador y empresario Leonardo Hisa, acusado de la muerte de su esposa Norma Carleti, y del joven Andrés Di Cesare, procesado en una causa por femicidio.
Godoy Lemos se había recibido de abogado en la Universidad Nacional del Litoral, y desarrolló una larga carrera tribunalicia, pero también ejerció la docencia como titular de Derecho II en la Facultad de Abogacía de la Universidad Nacional de Cuyo, de la cual fue gestor, decano y vice.
También incursionó en la política en las filas del justicialismo, ocupando la Subsecretaría de Gobierno en la década del '90 y posteriormente presidiendo el Consejo Asesor de Políticas de Seguridad Pública. Trabajó igualmente en las reformas del Código Procesal Penal. En el ámbito de la docencia era muy apreciado por sus alumnos, algunos de los cuales se convirtieron en colegas y otros en magistrados, y que veían en él a un profesor que se brindaba por encima de la simple hora de clase.
En 2008 la Cámara de Diputados le dispensó un reconocimiento especial en atención a su amplia labor profesional. El Colegio de Abogados y Procuradores de Mendoza lamentó la muerte de Godoy Lemos, y también lo hicieron muchos de sus pares y personas de la comunidad, lo que fue apreciado en el velatorio de sus restos y en la inhumación del cuerpo en el Parque de Descanso de Guaymallén.