El aclamado director cinematográfico polaco Andrzej Wajda murió ayer en Varsovia a los 90 años víctima de una insuficiencia pulmonar, según anunciaron medios de prensa polacos.
La muerte de Wajda, quien deja tras de sí una larga serie de celebradas películas inspiradas en la turbulenta historia de su país en los años 70 y 80, fue anunciada por el diario Gazeta Wyborcza Daily y la cadena noticiosa privada TVN24. Un amigo de la familia, bajo anonimato, confirmó a la AFP el deceso.
Wajda estaba hospitalizado desde hacia varios días y en un coma inducido debido a los problemas pulmonares que tenía, agregaron las fuentes.
El trayecto
El director, quien ganó en el año 2000 un Oscar a la trayectoria y en 2006 un Oso de Oro honorífico a toda su carrera, se había volcado a la cinematografía luego de fracasar en su plan original de ser militar tras haber luchado contra los nazis cuando aún era un adolescente.
En casi toda su filmografía, que arrancó en 1954, Wajda narró con sensibilidad trágica la historia de su propio país, a veces recurriendo a un notorio contenido alegórico y simbólico, otras a un no tan velado tono de comedia.
Sus tres primeras películas tuvieron una fuerte impronta antibélica y estuvieron protagonizadas por el mismo actor, Zbigniew Cybulski, considerado el “James Dean polaco”.
De estas tres, fueron "Kanal" (1956) y "Cenizas y diamantes" (1958) las que lo consagraron en el panorama del cine mundial y lo convirtieron en un hombre clave del cine polaco que cuestionaba la glorificación del hombre en combate.
A partir de allí inició un cine cada vez más simbólico y alegórico que dio títulos notables como “Todo para vender” (1968) o la comedia “Caza de moscas” (1969).
Su obra también incluye clásicos como "El hombre de mármol" (1977), una fuerte critica de la Polonia comunista, seguida tres años después por "El hombre de hierro" (Palma de Oro en Cannes 1981), que cuenta casi en tiempo real la historia de Solidaridad, el primer sindicato independiente del bloque comunista, con el líder Lech Walesa haciendo de sí mismo en la película.
La implicación del director en este movimiento llevó al gobierno polaco a declarar ilegal la productora de Wajda y el cineasta debió exiliarse en Francia.
En ese país realizó, en 1983, su personal "Danton", que protagonizó Gerard Depardieu y que polemizaba con los terrores de la Revolución Francesa desde una polémica mirada contemporánea.
En 1989, tras la distensión política en su país, pudo regresa a Polonia donde siguió filmando hasta 2013, año en que presentó el documental "Walesa, el hombre de la esperanza".
Sus películas "La tierra prometida" (1974), "Las señoritas de Wilko" (1979), "El hombre de hierro" (1981) y "Katyn" (2007) fueron, cada una en su momento, nominadas a un Oscar a la mejor película en lengua extranjera.
Andrzej Wajda se casó tres veces. Su segunda mujer fue la popular actriz polaca Beata Tyszkiewicz con quien tuvo una hija nacida en 1967. Su tercera mujer es la actriz y diseñadora de vestuario Krystyna Zachwatowicz.
