El actor soviético Alexéi Batálov, protagonista del filme "Moscú no cree en lágrimas", que ganó el Oscar a la mejor película extranjera en 1979, murió en la capital rusa a los 88 años de edad, informó hoy la familia del intérprete.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, expresó sus condolencias a la viuda y a la hija del famoso actor y calificó su muerte como "una pérdida irreparable para la cultura nacional", según un comunicado publicado en la web del Kremlin.
"Se ha ido un gran actor ruso, un verdadero maestro, un hombre de talento y carisma extraordinarios", señaló el mensaje presidencial.
Por su parte, el primer ministro ruso Dmitri Medvédev, escribió en la red social VKontakte, el facebook ruso, que la muerte de Batálov no es una pérdida solo para el cine y el teatro, sino también para "un gran número de familias rusas que crecieron con sus películas".
Batálov nació el 20 de noviembre de 1928 en la ciudad rusa de Vladímir y debutó en el cine en 1944.
Participó en decenas de películas, la mayoría de las cuales se convirtieron en éxitos locales y otras, como "Moscú no cree en lágrimas" y "Cuando pasan las cigüeñas" (la primera película rusa en ganar la Palma de Oro del Festival de Cannes), obtuvieron también un reconocimiento internacional.