En lo que va de 2018, en Buenos Aires se han detectado 14 casos de rabia en murciélagos, lo que implica el doble que en todo el año pasado. Autoridades sanitarias han aclarado que el aumento se debe a que la gente ha llevado más muestras a analizar. Desde Fundación Cullunche, Jennifer Ibarra sostuvo que la situación de Mendoza es diferente y que es difícil que un animal infectado llegue a la provincia.
En 2017, los laboratorios bonaerenses recibieron casi 600 muestras y encontraron que 6 murciélagos tenían rabia. En tanto, en los tres primeros meses de este año ya se han analizado más de 300 muestras y se ha verificado la presencia del virus en 14 de estos mamíferos alados. De ahí que se haya generado alerta en la población.
Sin embargo, el Programa de Conservación de los Murciélagos de Argentina emitió un comunicado en el que resalta que los diferentes centros de zoonosis del país no han señalado que haya aumentado el número de murciélagos infectados por el virus de la rabia, sino que se ha incrementado la cantidad de animales que son llevados a analizar. Esto, porque cada vez hay más personas informadas sobre cómo se debe proceder.
Así, subrayaron que los murciélagos son indicadores de un ecosistema equilibrado y saludable, pero casi nunca se ven porque tienen hábitos nocturnos. En cambio, cuando uno está enfermo de rabia, al tener afectado su sistema nervioso, puede estar volando de día y de manera errática. Suele terminar cayendo al piso y, si alguien intenta tocarlo, tratará de defenderse.
De ahí que, desde esta organización insten a no tocar directamente al animal, sino a cubrirlo con una caja, frasco o balde y llamar al centro de zoonosis más cercano para que vayan a buscarlo. Sobre todo, se debe evitar que los niños y las mascotas toquen al murciélago.
Jennifer Ibarra explicó que Fundación Cullunche es representante en Mendoza del Programa de Conservación de los Murciélagos de Argentina y que les preocupa que pueda generarse paranoia por la viralización de mensajes que corresponden a la realidad de otras provincias.
Aquí, destacó, el último caso de un mendocino que enfermó de rabia se dio en 1978 y el más reciente conocido de un perro que se infectó data de 1983. Además, las especies de murciélagos que hay en la provincia son insectívoros: pueden comer hasta 600 insectos en una hora y por eso es importante cuidarlos.
En cuanto a la posibilidad de que uno de estos mamíferos llegue desde otra provincia, Ibarra lo consideró poco probable. Es que los incendios en San Luis, La Pampa y Mendoza han eliminado vegetación que necesitarían para poder trasladarse. Además, también por el fuego, el ganado vacuno -del que se alimentan las especies hematófagas o “vampiros”- ha sido llevado afuera del territorio provincial.
De todos modos, destacó la importancia de que se vacune contra la rabia a perros y gatos. Y también opinó que se debería controlar que las mascotas que ingresan a Mendoza desde otras partes del país, tengan sus vacunas al día.
Ibarra agregó que si un murciélago ingresa a la vivienda de noche, lo mejor es abrir las ventanas y apagar la luz, ya que intentará salir solo. En caso de que esto no ocurra, se debe colocar un tarro sobre el animal y un cartón por debajo para retirarlo sin tocarlo, para evitar lesiones. Y coincidió en que si se observa uno muerto, se lo debe llevar a zoonosis provincial para que puedan analizarlo.
En detalle
De las 1.300 especies de murciélagos que se conocen, en Mendoza se encuentran 68 y todas ellas se alimentan de insectos nocturnos. Sus presas favoritas son mosquitos, polillas y cascarudos.
Esto mamíferos alados -no son aves ni tampoco roedores- duermen de día y salen a alimentarse de noche.
Sus sitios preferidos para descansar son edificaciones abandonadas. con espacios poco iluminados y grietas o pequeñas aberturas para poder esconderse.
Si llegan a anidar en una vivienda, se pueden alejar de manera sencilla. En la página www.pcma.com.ar se detallan los protocolos de exclusión.
Advertencia en Godoy Cruz
En la fachada de la clínica veterinaria Floriani, ubicada en calle Belgrano de Godoy Cruz, tienen pizarras y en ellas han decidido advertir a la gente cómo debería proceder en caso de encontrarse un murciélago. También, instan a las personas a mantener al día la vacunación antirrábica de sus mascotas.
El veterinario Ricardo Floriani reconoció que decidió poner esta advertencia por los casos de rabia en murciélagos en Mar del Plata (entre otras ciudades bonaerenses). En particular, aconseja alejar a los niños y capturar al animal para que lo analicen. Asimismo, recordó que tanto perros como gatos deben ser vacunados contra la rabia todos los años.