El volcán en erupción en la isla canaria de La Palma registró una nueva ruptura del cono, lo que provoca más desbordamientos de lava y desprendimientos, informó ayer lunes el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan). En sus redes sociales, Involcan acompaña esta información con un vídeo en el que se observa las densas coladas de lava que discurren ladera abajo con material magmático de gran tamaño.
Así, el volcán de La Palma se encuentra en su máxima actividad desde que entró en erupción y se sigue superando día a día, con desbordamientos constantes de lava, nuevos puntos emisores, una sismicidad en aumento y las mayores amplitudes de la señal del tremor en un mes.
Expertos creen que es “un disparate” la emisión de 53.600 toneladas de dióxido de azufre medida ayer, lo que da cuenta de la intensa actividad del volcán, que tiene abiertas cinco bocas eruptivas y diversos salideros por los que sale lava más líquida, y se contabilizan diez coladas.
En las últimas 72 horas se han acelerado los acontecimientos, con desbordes y roturas parciales de los conos principal y secundario, la apertura de fisuras y la caída de “grandes avenidas” de lava que por el momento están discurriendo de forma mayoritaria por la colada primigenia, la que llegó hasta el mar formando una isla, que ha aumentado su tamaño.