Dos jóvenes confesaron haber abusado sexualmente de su hermana de 13 años y dejarla embarazada en Estados Unidos. Sin embargo, como ambos pertenecen a la comunidad amish, quedaron en libertad porque el fiscal consideró que “habrían sido devorados vivos en la cárcel”.
El aberrante episodio sucedió en Springfield, Misuri. Los hombres acusados se llaman Aaron y Petie Schwartz, de 22 y 18 años, respectivamente.
Según publicó el New York Daily News, tanto ellos como otros dos hermanos menores violaron a su hermana, quien tenía 13 años en el momento de los hechos. La adolescente recientemente dio a luz a un bebé.
Los delitos salieron a la luz en junio pasado, cuando, ya embarazada, la chica le confió a un médico que había mantenido relaciones sexuales con sus cuatro hermanos.
Aaron y Petie Schwartz le dijeron a un alguacil que cada uno tuvo relaciones sexuales con la hermana al menos seis veces.
Tanto Aaron como Petie se salvaron de quedar encerrados en el sistema penitenciario estadounidense. Deberán escribir una carta de disculpa a su comunidad amish, realizar 100 horas de servicio comunitario y aportar un total de 500 dólares al Fondo de Restitución de la Aplicación de la Ley.
Inicialmente, los hermanos habían sido acusados de seis delitos graves de estupro y un delito grave de incesto, pero el fiscal del condado de Webster, Ben Berkstresser, defendió su decisión de presionar por una sentencia indulgente.
Conforme a lo que justificó el fiscal, “estos dos jóvenes habrían sido devorados vivos en el sistema penitenciario estatal”.
“Estos dos niños son muy inmaduros en relación con sus edades. En cuanto a la madurez, son mucho más jóvenes que su edad. Anteriormente fui muy duro con los amish cuando fueron acusados de crímenes de esta naturaleza”, dijo Berkstresser.
Los amish están instalados en Estados Unidos hace más de 300 años y basan su estilo de vida en tradiciones muy conservadoras. Entre otras cuestiones, evitan en todo momento el uso de la tecnología moderna.