El calentamiento global y el cambio climático comienzan a ser problemas cada vez más preocupantes. Los niveles del agua van en ascenso y las temperaturas promedio no paran de subir. De hecho, Europa vive una sofocante ola de calor histórica que ya ha provocado varias muertes.
Del otro lado del mundo, más precisamente en Hawái, la naturaleza también se encuentra convulsionada. En las últimas horas, el archipiélago sufrió una de las marejadas más altas y brutales en décadas, con olas que alcanzaron los siete metros de altura y llegaron a los techos de las viviendas más bajas.
El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos explicó el lunes que el fenómeno se debe a tres razones. En primer lugar, a la combinación de una fuerte marejada del sur que alcanzó su punto máximo el sábado por la noche. En segundo lugar, a las mareas inusualmente altas, y por último, al aumento del nivel del mar debido al cambio climático.
El meteorólogo a cargo del Servicio Meteorológico estadounidense en las islas explicó: “Es la más grande que ha habido en varias décadas’'. También agregó que se debió a “una interesante convergencia de eventos’'.
Varios videos de las olas se viralizaron en redes sociales. En uno de ellos, se puede ver como una de las olas rompe contra la costa y llega hasta donde se estaba celebrando una boda, inundando todo el lugar. La gente corre despavorida lejos del agua pero nada se pudo hacer para salvar las mesas y decoraciones.
Sin embargo la boda se llevó a cabo sin tantas complicaciones. Una mujer que asistió a la fiesta comentó: “No fue una situación que pusiera en peligro la vida de nadie’', dijo. “Fue simplemente como: `Oh, Dios mío... ¿Qué vamos a hacer? ¿Dónde vamos a poner las mesas?’’’.
Incluso se le pudo ver el lado positivo a la situación. La mujer agregó: “Tuvimos la ceremonia y fue hermoso, con todo el rocío. El mar estaba realmente bravo. Así que fue genial para las fotos”.
El novio declaró a un medio local: “Estábamos justo en el momento en que íbamos a empezar a mover un par de cosas y, sí, este gran muro básicamente apareció. La torta por suerte sobrevivió”.
Por su parte, la novia cerró: “No teníamos nuestra pista de baile, pero a nadie parecía importarle, al final de la noche todos estábamos bailando en el lodo y fue increíble”.
