Un popular tobogán de Detroit tuvo que cerrar a las cuatro horas de haber abierto, debido a que muchos usuarios sufrieron accidentes al deslizarse. El tobogán gigante se encuentra en el parque estatal de Belle Ilse Park, en Michigan, Estados Unidos, pero debido a la gran velocidad que agarraban las personas por su diseño causó severas lesiones, que se viralizaron en las redes sociales.
La atracción había sido reabierta luego de dos años cerrada por la pandemia. Sin embargo, al vializarse las imágenes los funcionarios del Departamento de Recursos Naturales de Michigan decidieron cerrarlo para realizar unos ajustes.
En los videos que se difundieron en las redes sociales se ve cómo las personas se deslizan por el tobogán pero salen disparados hacia el aire en las ondulaciones, cayendo con fuerza sobre el metal y golpeándose en diferentes partes del cuerpo.
Otros videos muestran cómo algunos se golpean la cabeza varias veces, otros los codos y algunos las caderas.
Qué dijeron desde el lugar
El personal de Belle Ilse Park confirmó que cerrarían el lugar “para hacer algunos ajustes en la velocidad”. Agregaron que “hemos limpiado la superficie y empezado a rociar un poco de agua en el tobogán entre paseos para ayudar a controlar la velocidad”.
Además, a las horas, compartieron un video en Facebook explicando cuál es la forma correcta de sentarse para poder deslizarse sin sufrir accidentes. En las imágenes un empleado muestra la postura que se debe tomar “hacia delante”, el modo de colocar las piernas y la distancia con los otras personas.
El tobogán gigante de Belle Isle Park
El tobogán gigante fue construido en 1960 dentro del Belle Isle Park y ha sido uno de los principales atractivos de Detroit, en el Estado de Michigan, Estados Unidos. Tiene una altura de casi 15 metros, lo cual permite apreciar una vista panorámica increíble, en donde se destaca la visualización de la frontera entre Estados Unidos con el área del sureste de Canadá.