Una nena de tres años viajó durante siete horas en un transporte escolar sin que ninguna de las autoridades de la escuela Maria Ossó de Sitges lo notara. En el vehículo iban dos tutoras que acompañan el recorrido y 61 alumnos. A raíz del hecho, El Consell Comarcal del Garraf, institución responsable del servicio de bus, ha hecho público el caso este martes y ha abierto una investigación para esclarecer los hechos.
Por el momento, según ha explicado la presidenta del ente, Mònica Gallardo, se ha suspendido cautelarmente a las dos tutoras que trabajan en esta línea, la que transporta a un mayor número de niños en la zona. 62, según cifras del Consell Comarcal, que asegura que precisamente este curso había ampliado el número de tutores de la línea (de una a dos) por la gran cantidad de niños que transporta.
Los hechos
El transporte recogió a la pequeña, en pleno periodo de adaptación (empezó en el colegio hace apenas unos días) en la ruta matinal para llevarla al centro a las nueve de la mañana, pero la criatura no llegó a bajar del vehículo por causas que ahora se investigan y que Gallardo confía que se esclarezcan en máximo 48 horas, tiempo que el Consell Comarcal ha dado a las dos empresas implicadas (la de transporte y la del servicio de tutoras) para ofrecer una explicación de los hechos, que la presidenta del Consell ha definido como “muy graves”.
“El mismo lunes por la noche abrimos diligencias. Firmé un decreto para abrir un expediente informativo a las dos empresas. Es muy urgente saber qué pasó y revisar los mecanismos para que no vuelva a suceder. Los niños han seguido yendo al colegio este martes y lo harán este miércoles y las familias tienen que sentirse seguras. Tienen que estarlo”, señala Gallardo.
No fue hasta las cuatro de la tarde, siete horas después de la hora en la que la niña debería haber bajado del autobús, cuando el mismo vehículo, de una empresa de la zona, iba a iniciar la ruta de la tarde para devolver a los 62 niños del Maria Ossó que usan este servicio a sus casas, cuando un trabajador localizó a la niña dentro del autobús. La menor fue trasladada a un centro médico donde los especialistas certificaron que se encontraba en buen estado de salud. Por suerte este lunes no fue un día excesivamente caluroso, como si lo fueron jornadas anteriores, y la pequeña, de solo tres años, llevaba el almuerzo y la cantimplora del colegio en la mochila.
Revisar los protocolos
La presidenta del Consell Comarcal explica que se han puesto a disposición de la asociación de familias de la escuela para revisar todos los protocolos y evitar que hechos como este se vuelvan a repetir. También hablarán con el centro educativo, que tampoco alertó de que la niña ha había llegado al centro, y con el Departament d’Educació. “Al final nosotros somos una administración ‘sandwich’, entre el Departament y los ayuntamientos”, añadió.
