El pasado miércoles, Verphy Kudi (18) se declaró culpable de causar la muerte de su hija de un año y medio, luego de abandonarla por seis días para irse a celebrar su cumpleaños. El hecho ocurrió en 2019 y fue investigado hasta la actualidad.
La joven salió de su casa en Brighton, Inglaterra, para celebrar su 18 cumpleaños dejando sola a su beba Asiah de 20 meses. La fiesta duró seis días y como era de esperar, la niña estaba muerta a su regreso.
A partir de ahí comenzó una exhaustiva investigación para dilucidar las razones por las que fallaron los protocolos de los servicios sociales: en primer lugar para entender cómo no detectaron que Kudi no estaba en condiciones de hacerse cargo de la menor; y en segundo lugar, para explicar cómo en seis días nadie advirtió de que había un bebé solo en el domicilio.
Según cuenta el diario británico Daily Mail, la madre adolescente vivía con su hija en un bloque de viviendas sociales gestionada por una asociación benéfica que trabaja dando oportunidades a jóvenes vulnerables.
Las cámaras de seguridad grabaron a Kudy saliendo de casa y su regreso días más tarde. Cuando volvió, la joven llamó a los servicios de emergencias alertando de que su hija no se despertaba y fue trasladada a un hospital cercano donde solo pudieron certificar su fallecimiento.
La autopsia reveló que la pequeña murió de hambre y de sed y que además había desarrollado una gripe durante el tiempo en el que la madre estuvo fuera.
Por otra parte, la teoría que explicaría que nadie se diese cuenta de la situación de la niña en seis días, es que el personal de las viviendas sociales no entra ni a las áreas comunes ni a los departamentos. Tampoco está autorizado para hacer inspecciones regulares.
Finalmente, un año y medio después, el juicio concluyó que Kudi es culpable de un delito de homicidio involuntario ya que la causa de la muerte de su hija fue atribuida a una negligencia.