Un oso polar fue sacrificado a balazos luego de que atacara a una mujer que se encontraba acampando en el archipiélago noruego de Svalbard, Noruega. La situación fue informada en las últimas horas por las autoridades del lugar, quienes confirmaron que la víctima estaba durmiendo en el interior de un glamping -domos de grandes dimensiones que se instalan en lugares naturales y cumplen la función de carpas- cuando fue sorprendida y atacada por un oso.
La mujer sufrió heridas leves en uno de sus brazos, mientras que el ejemplar del oso polar -autóctono de la zona- fue ahuyentado por disparos que se efectuaron al aire. Más allá de que el animal huyó ante las detonaciones, horas después fue localizado y fue sacrificado.
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La mujer que fue atacada por el oso polar había llegado de Francia y estaba en medio de una expedición en la zona de Sveasletta, en el mencionado archipiélago noruego remoto ubicado al norte, en el Mar Glacial Ártico y en las inmediaciones de Groenlandia. En el mismo campamento había 24 personas más, quienes se despertaron sobresaltadas tras escuchar los gritos de la mujer en el momento en que era atacada por el oso polar.
El domo de glamping se encontraba a la intemperie, en medio de un hostil y descampado paisaje donde predomina el hielo, los glaciares la nieve y los espacios abiertos. “Después de dos temporadas tranquilas debido al coronavirus, ahora hay muchos más turistas en Svalbard. Como resultado, también vemos un aumento en el número de osos polares que se acercan a los turistas”, explicó el jefe de Estado mayor, Kjetil Vereide al medio noruego VG.
A raíz del ataque, los responsables del campamento solicitaron atención médica de urgencia, y ésta llegó en un helicóptero para asistir a la mujer con rapidez. Dada la rápida atención y lo leve de las heridas, la víctima fue dada de alta a las pocas horas. “Es dramático cuando un oso polar ataca a un humano. El disparo interrumpió el ataque y alejó al oso de la escena. Además, se abrió una causa penal por el incidente”, destacó la autoridad, quien agregó que se trata de un proceso judicial de rutina que se da cuando se mata a un oso polar. “Veremos si se ha respetado lo establecido y así evitar tener que sacrificar a otros osos polares en el futuro”, agregó.
Entre el turismo aventura, el peligro y la portación de armas
El turismo en el archipiélago de Svalbard es muy demandado por quienes quieren disfrutar del aire libre y los paisajes polares. Más allá de lo desolador de los paisajes -que son un imán para quienes disfrutan de la naturaleza en estado puro-, entre la fauna del lugar se destacan osos polares, zorros árticos, linces boreales, glotones, renos y buey almizclero, entre otros animales.
Estos paquetes se contratan por medio de agencias de turismo, que se encargan de armar toda la expedición y tienen a su cargo el armado de los glamping también. Y, según explicó la autoridad del lugar, justamente a causa del inminente peligro y la presencia de osos polares en el archipiélago es que se advierte a quienes lleguen al lugar que deberán ahuyentar a los osos polares por sus propios medios (lo que incluye llevar armas de fuego durante el viaje y la expedición)
De acuerdo a las estadísticas del Instituto Polar Noruego, en Svalbard viven entre 1.900 y 3.600 osos polares viviendo en las inmediaciones del Mar de Barents. Mientras que según datos de los medios noruegos, hay cerca de 300 ejemplares viviendo en la zona donde se produjo el ataque y que suele recibir a una gran cantidad de turistas expedicionarios.