Un preso condenado a muerte pidió retrasar la fecha de su ejecución para poder donar uno de sus riñones. Ramiro González, le envió una carta al gobernador de Texas, Greg Abbott, con la solicitud.
Según informó Univisión, los abogados pidieron ante la Junta de Indultos y Libertad Condicional del estado 180 días de retraso para que ocurra la donación.
Su ejecución ha sido programada para el 13 de julio próximo, según el Texas Tribune. “No tengo ninguna duda de que el deseo de Ramiro de ser un donante altruista de riñón no está motivado por un intento de última hora de detener o retrasar su ejecución”, escribió Michael Zoosman, el guía espiritual de González.
“Él expresó sincero arrepentimiento por la vida que tomó”, agregó Zoosman, quien además dijo que la idea de donar un riñón surgió cuando un miembro de su congregación intentó sin éxito hallar un donante.
Tras los estudios, se supo que Ramiro no era compatible con el paciente pero el preso decidió seguir adelante y ofrecer ese riñón a otra persona.
“Iré a mi tumba creyendo en mi corazón que esto es algo que Ramiro quiere hacer para ayudar a que su alma esté bien”, dijo Zoosman y aseguró que el Gonzaléz no busca evitar su condena.
Además, los médicos de la Universidad de Galveston en Texas constataron que González era un gran candidato por su tipo de sangre.
“Prácticamente todo lo que queda es la cirugía para extirpar el riñón de Ramiro. UTMB confirmó que el proceso podría hacerse en un mes”, explicaron los abogados a Univision.
Condenado a muerte por femicidio
Ramiro González fue condenado a muerte por asesinar a Bridget Townsend, de 18 años, en 2001. Sus restos fueron hallados casi dos años después de que la reportaron desaparecida.
Si la Junta no aprueba el pedido de los abogados el recluso recibirá la inyección letal el 13 de julio.
