El presidente de Perú, Manuel Merino, anunció este domingo su renuncia cinco días después de haber asumido, en medio de masivas protestas en su contra y luego de que el Congreso lo exhortara a dimitir bajo amenaza de destituirlo de todos modos.
“Quiero hacer reconocimiento a todo el país que presento mi renuncia”, declaró Merino en un mensaje al país por televisión, lo que desató una celebración en las calles de Lima, al día siguiente de la violenta represión de unas protestas que dejó dos muertos y un centenar de heridos.
Las manifestaciones han dejado dos muertos y 94 heridos, según responsables del Ministerio de Salud. Pero la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos afirmó que los lesionados son 112 y alertó que además hay 41 manifestantes “desaparecidos” tras las marchas del sábado en Lima y otras ciudades del país.
Valdez exigió el sábado por la noche la “renuncia inmediata” de Merino, tal como exigían en las calles miles de manifestantes desde el martes. Esa petición cuenta ahora al parecer con el apoyo de varias bancadas del Congreso, cuya imagen quedó muy deteriorada tras el juicio político contra Vizcarra, un mandatario muy popular.