Dos hombres, una mujer y un perro fueron encontrados muertos en el interior de una cisterna subterránea en el estado de Texas, Estados Unidos. De acuerdo con informes policiales, el grupo, que había asistido junto a un tercer hombre, se hallaban en el campo de maíz con el objetivo de cazar cerdos, práctica común en la zona.
La Policía del Condado de Bastrop respondió a un llamado al 911 el pasado miércoles 9 en el que se alertaba que tres individuos había quedado atrapados en el pozo de un campo de maíz. Cuando los primeros efectivos llegaron al lugar cerca de la una de la mañana, dieron con la cisterna parcialmente llena de agua, la cual despedía olores similares a una fosa séptica. Sin embargo, no observaron signos de vida, detalló la comisaría en un comunicado oficial.
Según la reconstrucción de los hechos, los cuatro cazadores caminaban por el lugar cuando el perro que los acompañaba cayó dentro del pozo. En un intento por rescatarlo, uno de los hombres ingresó a la cisterna. Acto seguido, otros dos acompañantes siguieron sus pasos “para posiblemente rescatar a la primera persona, mientras que un cuarto fue a su camioneta para pedir ayuda y llamar al 911″, consignó el sheriff.
La cisterna, al tener el nivel de agua “muy por debajo de la pequeña abertura”, le dificultó el ascenso a los individuos e impedía su salida. Como consecuencia, dos hombres y una mujer, todos oriundos de Florida, fallecieron en el lugar junto al canino.
Las víctimas fueron identificadas como Denise Martinez (26), Delvys Garcia (37) y Noel Vigil-Benitez (45). En una conferencia de prensa realizada el 10 de agosto, los efectivos notificaron a los familiares.
El rescate de los cuerpos
Las tareas de recuperación de los cuerpos de las víctimas no fue más sencilla. De acuerdo con la Policía del Condado de Bastrop, la inestabilidad de la cisterna, los vapores y el agua estancada dificultaron el descenso de los primeros oficiales en responder. Por ello, tomaron la decisión de “ventilar la cisterna eliminando el gas de sulfuro de hidrógeno y luego eliminando el agua. Aún así, la integridad de la estructura estaba en duda”, detallaron.
“Se hicieron esfuerzos para excavar al lado de la estructura para permitir el acceso desde el costado a un nivel cerca de donde se habían ubicado los cuerpos, pero estos esfuerzos se abandonaron ya que romper el costado debilitaría las paredes y haría que la entrada fuera insegura”, agregaron.
Como última alternativa, se utilizó un pequeño dron que se introdujo en la cisterna para observar las condiciones de las paredes y, así, poder bajar al investigador D. Newman de la oficina del sheriff, quien se ofreció como voluntario para llevar a cabo la extracción de los cuerpos.
El operativo contó con la ayuda de cuerpos de bomberos de regiones contiguas y cuadrillas de Servicios Públicos de la Ciudad de Elgin. Hacia las 7:30 las tareas habían concluido. Los cuerpos de los dos hombres, la mujer y el perro fueron trasladados a la morgue para la realización de la autopsia.