Unas 259 personas han muerto en Sudáfrica por las devastadoras inundaciones causadas por intensas lluvias en la costa este del país, donde las autoridades se enfrentaban a un gran flujo de cadáveres en las morgues, indicaron fuentes regionales este miércoles.
Las lluvias más intensas en más de 60 años han dejado paisajes devastados, con puentes derrumbados, deslizamientos de tierra y carreteras sumergidas en torno a la ciudad portuaria de Durban, primera urbe de Kwazulu-Natal (KZN, este) y epicentro de la catástrofe.
“Nuestras morgues están sometidas a presión”, declaró en una entrevista televisada Nomagugu Simelane-Zulu, representante del departamento de Salud de la provincia. Las precipitaciones obligaron al puerto, el más importante de África subsahariana, a interrumpir sus operaciones, ya que la principal carretera de acceso sufrió graves daños. Decenas de personas están desaparecidas, y los socorristas hablan de una “pesadilla”. “Vemos cómo estas tragedias golpean a otros países, como Mozambique o Zimbabue, pero ahora somos nosotros los afectados”, dijo el presidente Cyril Ramaphosa.
Estas lluvias no fueron tropicales, sino provocadas por un fenómeno meteorológico que trajo lluvia y frío a gran parte del país. Cuando las tormentas llegaron al clima más cálido y húmedo de la provincia de KZN, llovió aún más.