La historia de una mujer de 32 años está dando la vuelta al mundo por su curiosa e inusual condición médica. Y es que Kelsey Hatcher, oriunda de Alabama, se enteró a mediados de año que iba a ser mamá por cuarta vez. Sin embargo, lo último que esperaba oír era que está gestando a dos bebés en sus dos úteros al mismo tiempo.
En 2007, Kelsey tenía tan solo 17 años cuando fue diagnosticada con una anomalía conocida como útero didelfo. Esta condición es extremadamente inusual y consiste en una malformación congénita que ocasiona que la cavidad del útero se divida en dos. Según diferentes expertos, entre un 0.3% y un 1% de mujeres en el mundo pueden tener un doble útero en su cuerpo.
Independientemente de su condición, la estadounidense atravesó tres embarazos que transcurrieron con normalidad e introdujeron a Raelynn de 6 años, River de 4 años y Rhemy de 1 año, en su vida. No obstante, cuando fue sorprendida en junio de este año con la noticia de que iba a ser mamá por cuarta vez, decidió asistir a una consulta médica para realizarse los chequeos pertinentes.
Durante el ultrasonido en el hospital de la Universidad de Alabama, la doctora que la atendió le aseguró que el embarazo se desarrollaba perfectamente, según resaltaron medios locales. Sin embargo, aprovechando que se encontraba allí, Kelsey le contó de su particular condición y le pidió que realizara un análisis a fondo para constatar su bienestar general.
Lo último que esperaba ver la mujer en ese momento era el asombro de la profesional al oír un segundo latido proveniente del otro lado de su abdomen. Tras varias preguntas, Kelsey constató que estaba embarazada en ambos úteros al mismo tiempo. “Dije: ‘Bueno, ahí dentro hay dos’. Y Caleb [su marido] me dijo: ‘Estás mintiendo’. Le dije: ‘No, no miento’”, reveló la estadounidense al medio WVTM 13.
La noticia los dejó sin palabras a ambos, pero lo asimilaron de la mejor forma y, con 34 semanas y con fecha de nacimiento pactada para el 25 de diciembre, Kelsey y Caleb Hatcher se encuentran más que preparados para la llegada de las gemelas.
Incluso la pareja ya prevé buscar más nombres que comiencen con la letra R para seguir con el patrón que comenzaron con su hija mayor, Raelynn. “No sé qué ha pasado diferente esta vez, pero es una locura”, admitió al mencionado medio Caleb.
Diferentes profesionales precisaron que las mujeres que presentan esta atípica formación pueden llevar embarazos a término satisfactorios. En este sentido, los galenos del hospital de Alabama le informaron a Kelsey que las gemelas se estaban gestando de manera adecuada.
Tranquila y con la situación asimilada, lo único a lo que le teme la madre estadounidense es a “cuando ambas decidan hacer su entrada en el mundo”.