Rusia lanzó durante la noche del jueves un misil balístico intercontinental contra la ciudad de Dnipró en el centro-este de Ucrania, según dijeron el jueves las autoridades ucranianas. De confirmarse, sería la primera vez que Moscú utiliza ese tipo de misil en la guerra.
En un comunicado en la app de mensajería Telegram replicado por la agencia AP, la fuerza aérea de Ucrania no especificó exactamente qué tipo de misil se habia disparado, pero señaló que salió desde la región de Astracán en Rusia, que limita con el mar Caspio. Un misil balístico intercontinental fue disparado hacia la ciudad de Dnipró junto con otros ocho misiles, indicó, y el ejército ucraniano derribó seis de ellos.
El ataque dejó dos heridos y causó daños en un centro industrial y uno de rehabilitación para personas con discapacidad, según funcionarios locales.
Aunque el alcance de un misil balístico intercontinental (ICBM, por sus siglas en inglés) parecería excesivo para su uso contra Ucrania, esos proyectiles están diseñados para llevar ojivas nucleares y su uso serviría como un sombrío recordatorio de la capacidad nuclear de Rusia y un poderoso mensaje de posible escalada.
La guerra adquirió una creciente dimensión internacional con la llegada de tropas norcoreanas para ayudar a Rusia en el campo de batalla, algo que, según funcionarios estadounidenses, provocó un cambio en la política del presidente estadounidense Joe Biden sobre permitir que Ucrania dispare misiles estadounidenses de mayor alcance hacia Rusia. El Kremlin respondió con amenazas de escalar aún más.
El ataque ocurre dos días después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, firmara una doctrina nuclear revisada que rebaja oficialmente el umbral para el uso de armas nucleares por parte del país.
Ucrania disparó varios misiles de mayor alcance suministrados por Estados Unidos el martes y supuestamente disparó misiles Storm Shadow de fabricación británica el miércoles hacia Rusia.
Putin advirtió previamente a Estados Unidos y otros aliados de la OTAN que permitir que Ucrania use armas de mayor alcance suministradas por Occidente para golpear territorio ruso supondría que Rusia y la OTAN están en guerra.
El Ministerio ruso de Defensa dijo el jueves que sus sistemas antiaéreos derribaron dos misiles Storm Shadow, seis cohetes HIMARS y 67 drones.
El anuncio se hizo dentro del reporte diario del Ministerio sobre la “operación militar especial” en Ucrania y no indicaba dónde o cuándo se habían producido o a dónde iban dirigidos los misiles.
La nueva doctrina permite una posible respuesta nuclear de Moscú incluso a un ataque convencional sobre Rusia por cualquier nación que esté apoyada por una potencia nuclear. Aunque la doctrina prevé una posible respuesta nuclear de Rusia a un ataque convencional, está formulada de manera vaga para evitar un compromiso firme de utilizar armas nucleares y mantener abiertas las opciones de Putin.
En paralelo, embajadas de países como Estados Unidos, España, Italia y Grecia en Kiev cerraron sus puertas ante el riesgo de un ataque masivo ruso en territorio ucraniano.