El izquierdista Gabriel Boric (35) se convirtió con el 55,87% de los votos en el nuevo presidente de Chile tras derrotar al derechista José Antonio Kast. El exlíder estudiantil y uno de los rostros de las protestas sociales no solo es el más joven en asumir el liderazgo del país vecino, sino también alguien quien viene a inaugurar una nueva era política y social: por primera vez desde la vuelta de la democracia, la izquierda extrema tomará las riendas del poder.
Con el 99,99% de las mesas escrutadas, el actual diputado, oriundo de Punta Arenas, obtuvo un 55,87% de los votos, lo que representa más de 11 puntos porcentuales de diferencia respecto a su rival Kast.
Bajo la coalición Apruebo Dignidad -que reúne al Frente Amplio y al Partido Comunista-, Boric había obtenido en la primera vuelta el 25,8% de los votos. De cara a la segunda vuelta, consiguió agrupar bajo su candidatura a toda la centroizquierda una vez que moderó su plan de trabajo.
Nunca antes se había dado un incremento tan pronunciado de la participación entre la primera y la segunda vuelta, una tendencia que favoreció a Boric, que se ha convertido en el presidente elegido con mayor caudal de votos desde el retorno a la democracia en 1990.
Dentro de su plan 2022-2026 (asumirá el 11 de marzo) se establecen 30 ejes centrales, que van desde “Plan de recuperación económica y estrategia sanitaria” hasta “seguridad ciudadana, prevención del delito y refundación de policías”, los cuales se basan en cuatro pilares centrales: justicia ambiental, desarrollo económico, descentralización e igualdad de género.
“Vamos a expandir los derechos sociales y lo haremos con responsabilidad fiscal. Lo haremos cuidando nuestra macroeconomía”, dijo Boric en su primer discurso emitido posterior al triunfo, que derivó anoche en calles colmadas de manifestantes.
Boric, desde pequeño enfocado en la política
Boric sabe lo que es ocupar cargos desde su infancia. A los seis años fue presidente del primer grado, luego del tercero, en la universidad lideró a los alumnos de la facultad de Derecho, en 2012 encabezó la entonces poderosa Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile y en 2014 inició el primero de dos períodos como legislador.
Por años fue conocido por su caballera larga y una frondosa barba que en 2017 cambió por un corte rapado a ambos lados de la cabeza y con una franja de cabello al medio, al estilo mohicano.
En julio, para las primarias presidenciales de su sector en las que se impuso ampliamente al candidato Daniel Jadue, se cortó el pelo, se arregló la barba, cambió su manera informal de vestir empezó a mostrarse con un par de elegantes anteojos. Lejos del Boric que juró por primera vez como diputado en 2014 sin corbata y ante la queja de un parlamentario sostuvo: “me importa bien poco cómo me juzguen por mi pinta (apariencia)”.
A menos de una semana de la segunda vuelta presidencial, los padres de Boric recibieron a The Associated Press en su residencia de Punta Arenas, 3.500 kilómetros al sur de Santiago, y mostraron recuerdos de infancia del candidato, incluida una carta donde busca el voto de sus compañeros para liderar su clase a los 8 años y les recuerda que ya había ocupado el cargo. “Yo salí presidente en primero, pero en ese tiempo yo no sabía lo que era ser presidente, por eso fui un mal presidente”, se lee en la hoja. “Ahora estoy preparado y les prometo ser buen presidente”. Y fue electo.
Su madre, María Soledad Font, dijo que “nunca’' escuchó a su hijo decir que quería ser presidente del país, pero recordó así lo había predicho la abuela materna de Boric -aficionada a la astrología-, luego de leerle las líneas de las manos.
Recientemente en un programa de televisión el candidato mostró su faceta romántica. Durante el estelar Boric le recitó el poema “El Doliente”, de Óscar Hahn y contó que en la intimidad “nos decimos ‘chofa y chofo’ de alcachofa, nos gustan mucho las alcachofas’’.
En tanto, su novia Irina Karamanos, una cientista social de 32 años, opinó que el cargo de primera dama “merece ser repensado. Estamos en tiempos distintos”.
Hijo de un ascendiente croata y una madre de ascendencia española, Boric nació en Punta Arenas y en la Cámara de Diputados representa a la región de Magallanes a la que pertenecen esa localidad y la Antártica, lo que ha influido en la importancia que su programa le da a la descentralización de Chile, que tiene más de 4.200 kilómetros de largo.
Concluido el bachiller, Boric viajó a la capital para estudiar Derecho y lideró las demandas por educación gratuita y de calidad que en momentos tuvieron contra las cuerdas al primer gobierno del presidente centroderechista Sebastián Piñera, al que sucederá desde el 11 de marzo de 2022. Egresó en 2012, aunque no se tituló.
Cuando aún no estaba en sus planes postularse a la presidencia, en noviembre de 2019, experimentó duras críticas del Frente Amplio y el Partido Comunista -que más tarde integrarían el pacto que lo postula- por firmar individualmente un acuerdo constitucional que dio lugar a la convocatoria a un plebiscito que llevó en 2021 a la instalación de una Convención Constitucional que redacta una nueva constitución que reemplazará a la impuesta por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y que deberá ser refrendada en un plebiscito en 2022.
Las propuestas de Boric para su presidencia hasta 2026
Su alianza propone una suba de impuestos a los ricos para mejorar la educación y la salud, un alza del salario mínimo, la creación de 500.000 empleos femeninos, una pensión universal para los adultos mayores, la defensa de los derechos de la comunidad LGBTIQ+ y de las minorías étnicas y el fin de las privadas Administradoras de Fondos de Pensiones -criticadas transversalmente por las bajas pensiones que entrega- y reemplazarla por un ente público autónomo.
En una de las que es quizás la propuesta menos popular de su plan es el que busca elevar el impuesto específico a los combustibles a 7 UTM por m3 para gasolinas y diésel sin exenciones ni devoluciones, además de implementar “impuestos verdes” cuyo fin no será recaudar sino desincentivar algunas conductas, como cambio de uso de suelos, ganadería extensiva y productos contaminantes.
Respecto a la economía del país, el actual parlamentario estableció que impulsará un conjunto de reformas que permitan incrementar la recaudación que va entre el 8% y el 8,5% del PIB en dos periodos presidenciales, además de reducir la evasión en el equivalente a 3,5% del PIB.
Durante toda la campaña electoral su adversario Kast le enrostró en múltiples ocasiones su reunión en 2018, en Francia, con Ricardo Palma Salamanca, un militante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez que combatió por las armas a la dictadura militar y que en 1996 huyó de una cárcel chilena donde cumplía una condena por el asesinato en 1991 del senador conservador Jaime Guzmán, principal ideólogo de la constitución pinochetista.
Kast también reflotó un vídeo que muestra a Boric recibiendo sonriente una polera que muestra el rosto de Guzmán con un balazo en la frente. “Cuando me equivoco soy capaz de reflexionar de mis errores y pedir perdón”, respondió el referente izquierdista, quien ahora cambia el mapa político de Latinoamérica con su destacada elección.