Mucho se ha hablado acerca de la vacuna rusa Sputnik V. Esta tiene como propósito lograr la inmunidad frente al coronavirus. Hay detractores que cuestionan su efectividad, como es el caso de un gran porcentaje de la población, que ha optado por ser precavidos y esperar para tener mayores certezas acerca de si tienen consecuencias negativas o no en la salud.
Tal es el caso del presidente ruso, Vladímir Putin, el cual aún no tiene previsto vacunarse contra la covid-19 y, según los sondeos, un 58% de los rusos tampoco está dispuesto a inocularse con la vacuna Sputnik V, según 20 minutos.
Putin tomará una decisión después de que el Ministerio de Sanidad publique el informe definitivo sobre Sputnik V y el resto de vacunas, según explicó Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, a la prensa local.
Peskov aseguró el domingo que Putin ya había tomado una decisión después de que el sábado el ministro de Sanidad, Mijaíl Murashko, autorizara la vacunación para los mayores de 60 años. Cabe resaltar que el Fondo de Inversiones Directas, encargado de la venta de la vacuna rusa, destacó hoy que los ensayos clínicos mostraron una eficacia “mayor del 90%” en dicho segmento de edad.
Por otro lado agregó que el presidente, quién cumplió en octubre 68 años, no puede decidir por su cuenta y riesgo cuándo vacunarse. “Él mismo dijo que se vacunará, pero que será él quien comunique cuándo y cómo tendrá lugar”, dijo.
Recientemente, en su rueda de prensa anual, Putin dijo que se vacunaría “sin falta”, a lo que Peskov añadió este lunes que aún se desconoce si esas imágenes se harán públicas, como en el caso de otros mandatarios mundiales.
Con todo, negó que dicha situación pueda influir en la confianza de la población hacia la vacuna rusa, que ya ha sido registrada en dos países extranjeros, Argentina y Bielorrusia.
“De ninguna manera. Se está aumentando la capacidad de los fabricantes rusos de la vacuna... Esto nos permite estar seguros de que en los días del año que quedan y en las primeras semanas del próximo año la producción se incrementará”, destacó.
Por otro lado cabe resaltar que, según informó el Centro Levada, un 58% de los rusos no está dispuesto a vacunarse por el momento, sea porque quieren esperar a los resultados definitivos de los ensayos clínicos o porque temen los efectos adversos.
Sólo un 38% se muestra impaciente por inocularse cuanto antes, mientras un 57% de los encuestados teme contraer el coronavirus.
En las redes sociales muchos rusos se han quejado de que Moscú suministre masivamente la vacuna a otros países antes que a sus propios ciudadanos.
En respuesta, el primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, anunció el sábado que el Gobierno suministrará casi 6,5 millones de dosis de Sputnik V a sus centros médicos en enero y febrero de 2021.
La Sputnik V mostró una eficacia del 91,4% en el último control efectuado en la tercera fase de los ensayos clínicos, datos que, según sus creadores, “permiten afirmar con seguridad que es altamente eficaz y totalmente segura para la salud”.
En nuestro país la campaña de vacunación contra el coronavirus comienza este martes. En la provincia de Mendoza las primeras 5.500 dosis de Sputnik V serán destinadas a personal de salud. A medida que se reciban más dosis, se ampliará el espectro de la población, siempre de manera gratuita y voluntaria.