Centenares de personas se manifestaron hoy en Madrid contra las medidas de confinamiento parcial impuestas en algunas partes de la región, sobre todo en barrios de bajos ingresos y muy poblados, para contener el aumento de casos de coronavirus en la capital española, la más afectada por la pandemia en el país.
“¡No es confinamiento, es segregación!”, coreaba la multitud ante el Parlamento de la Comunidad de Madrid, ubicado en el distrito de Vallecas, uno de los barrios más afectados por las medidas de confinamiento parcial vigentes desde la semana pasada.
Los manifestantes solicitaban hoy la renuncia de la presidenta conservadora de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien cosechó críticas al decir que el “estilo de vida” de las personas residentes en las áreas afectadas era en parte culpable del aumento de casos de coronavirus.
“A los ricos no los confinan”, señalaba uno de los carteles que se exhibieron durante la protesta, en la que participaron grupos de jóvenes, parejas de jubilados y padres jóvenes empujando cochecitos de bebé.
Las medidas tomadas en Madrid no están en consonancia con una solicitud del gobierno central español, de izquierda, que instó a imponer restricciones en toda la ciudad, opinión compartida por muchos manifestantes.
“No tiene sentido que puedas ir a trabajar en un barrio rico, pero no puedes ir a tomar algo. El número de infectados está aumentando en todos lados, las reglas deberían ser iguales para todos”, señaló un electricista de 27 años que acudió a la manifestación con un grupo de amigos, citado por la agencia de noticias AFP.
Unas 850.000 personas quedaron confinadas sin poder salir excepto por razones laborales, escolares o médicas desde el 21 de septiembre, aunque pueden moverse libremente dentro de sus vecindarios, y a partir de mañana, otras 167.000 en la región, que cuenta en total con unos 6,6 millones habitantes, quedarán confinadas en sus barrios, superando el millón de afectados.
Los parques en las zonas afectadas fueron cerrados y los restaurantes y otros negocios deben cerrar a las 22 horas. En total, desde el inicio de la pandemia de coronavirus, España acumula 716.481 personas infectadas, de las cuales 11.006 están hospitalizadas, con 1.465 en cuidados intensivos, y 31.232 murieron.
Una de las comunidades más afectadas por el coronavirus es Madrid, que reportó en el último día 51 decesos y la presión hospitalaria aumenta con el 25,4% de las camas ocupadas, mientras que la media de España se sitúa en el 8,14%.
“Hay un riesgo serio en la comunidad de Madrid para sus ciudadanos”, expresó el ministro de Salud del Gobierno español, Salvador Illa, después de que ayer recomendara ampliar las restricciones en la capital española.
Díaz Ayuso, que se resiste a un confinamiento total, aseguró hoy que aceptaría cerrar todas las poblaciones de la autonomía con más de 500 contagios por cada 100.000 habitantes si se sigue el mismo criterio en toda España y se hacen PCR en Barajas, Ave y Renfe, según han detallado fuentes del Gobierno regional a Europa Press.
Desde el Ejecutivo autonómico aseguran que, por su parte, no hay ningún “choque” con el Gobierno central sino que deciden lo que van a hacer, “y ellos tienen que ayudar”.
Sin embargo, Illa pidió ayer a la Comunidad de Madrid “revisar sus decisiones y escuchar a la ciencia” a la hora de gestionar la pandemia del coronavirus.