El partido político Vox español formará un gobierno de coalición en la región de Castilla y León, según informaron miembros del partido este jueves.
Esta será la primera incursión del partido de extrema derecha en un gobierno regional en España. La medida se produce después de que el Partido Popular (PP) no lograra obtener la mayoría en las elecciones regionales con la esperanza de gobernar solo. Sin embargo, Vox reemplazará a su anterior aliado de coalición, el partido Ciudadanos. En el pasado, Vox siempre había prestado su apoyo a los gobiernos del Partido Popular, pero sus buenos resultados en Castilla y León le dieron a su liderazgo el apoyo suficiente para exigir poder gobernar conjuntamente.
El PP también confirmó este jueves que había llegado a un acuerdo con Vox, que le permitía formar “un Gobierno estable y sólido” para la región. Varios medios españoles informaron que Vox ocupará la vicepresidencia y tres cargos ministeriales en el gobierno regional de Castilla y León. Mientras los simpatizantes de Vox celebraron la hazaña lograda por el partido, la decisión del PP de gobernar junto a la colectividad de extrema derecha fue recibida con duras críticas. ”Que Vox, un partido xenófobo, machista, contrario al modelo constitucional vigente y, como poco, próximo a los más próximos aliados europeos de (Vladimir) Putin entre en un gobierno regional en España es una vergüenza.”, tuiteó el periodista del diario El País, Fernando Pérez.
De hecho, Vox ha apoyado a otros líderes de extrema derecha como la francesa Marine Le Pen, el italiano Matteo Salvini y el expresidente estadounidense Donald Trump. Pérez también señaló que esta es el segundo gran suceso dentro del Partido Popular, desde que destituyó a su líder Pablo Casado, quien tuvo que abandonar la presidencia del partido conservador por las investigaciones de corrupción al interior de la colectividad. Vox se ha hecho conocer internacionalmente por sus sentimientos antimusulmanes y antiinmigrantes, así como por sus posiciones socialmente conservadoras sobre las mujeres y la comunidad LGBTQ.
La semana pasada, el líder nacional de Vox, Santiago Abascal, argumentó en el Parlamento que los refugiados ucranianos deberían ser aceptados en España, pero llamó “invasores” a los inmigrantes musulmanes que llegan a España desde África.
