Un desfile de Alta Costura de Schiaparelli, que inauguró la Semana de la Moda de París, generó polémica por unas piezas hiperrealistas de cabezas de animales.
Ocurre que el aspecto de las piezas confundió a más de uno. No solo por la calidad en los detalles sino porque además tienen el tamaño exacto que tendría una cabeza real.
Según informó el diario español El Mundo, Daniel Roseberry ha presentó la colección “Infierno”, inspirada en La Divina Comedia de Dante. En la obra, el director artístico ha tratado de expresar el tormento que todo artista siente entre complacer al público o impresionarse a uno mismo.
Con esta premisa, el diseñador puso cabezas hiperrealistas de un leopardo, un león y una loba, que representan respectivamente la lujuria, el orgullo y la avaricia.
Las mismas están hechas de espuma, resina y otros materiales artificiales y colocadas a modo de broche sobre vestidos que han lucido Irina Shayk, Kylie Jenner y Naomi Campbell.
“Elsa Schiaparelli siempre sorprendió con su trabajo y, con los años, la gente ha aprendido a venir a Schiaparelli con espíritu de curiosidad. No sabes lo que te vas a encontrar”, dijo Daniel Roseberry, director creativo de la marca.
Lo mismo ocurre con los adornos que componen una falda, que parecen lentejuelas y son piezas de madera. El terciopelo cambia de color según la luz con la que se mire, como si fueran las alas de una mariposa.