El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, dijo sentir “horror” e “indignación” ante las “terribles insoportables” en la ciudad ucraniana de Bucha, donde se descubrieron numerosos cadáveres tras retirarse las tropas rusas, y pidió que “los crímenes de guerra” no queden impunes.
“Horror, dolor e indignación ante las terribles imágenes que nos llegan desde la localidad ucraniana de Bucha. Los crímenes de guerra que se están cometiendo no pueden quedar impunes”, tuiteó el líder socialista, sumándose a las voces de condena de otros países europeos.
“Toda mi solidaridad con las víctimas de esta barbarie. Los crímenes de guerra deben ser investigados rápidamente y sus responsables castigados”, señaló de su lado el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en Twitter.
Ucrania acusó el domingo al ejército ruso de haber cometido una “masacre deliberada” en Bucha, una ciudad al noroeste de Kiev, así como otros “horrores” en las regiones “liberadas del invasor”.
En la devastada localidad de Bucha, de donde se difundieron imágenes crudas de cuerpos de civiles esparcidos por las calles, fueron hallados en fosas comunes los cuerpos de 300 civiles, después de que las tropas rusas se retiraran de la zona.