El drama provocado por la petrolera Repsol en Perú parece no tener fin, luego del derramamiento de más de 11 mil barriles de petróleo al mar y el consecuente daño al medio ambiente.
El accidente, ocurrido en la refinería que la empresa española tiene en La Pampilla –al norte de Lima- afectó a más de 105 kilómetros de litoral y se transformó en el peor desastre ecológico ocurrido en la historia reciente de dicho país. Según lo señaló el portal 20minutos, el impacto en el medioambiente se siente en una treintena de playas de la capital nacional, siendo la fauna y la flora los principales afectados.
Giovanna Yépez, subgerente de zoología del Parque de las Leyendas de Lima, explicó al diario El Comercio que “Las tasas de mortalidad en derrames de petróleo oscilan en 50%. Nosotros estamos en un 40%. Es todavía una cifra alta, pero estamos tratando de reducirla con mucho esfuerzo”.
En tanto, Deyvis Huamán -responsable de la Unidad de Monitoreo, Vigilancia y Control del Sernanp (Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado)- aseguró al mismo medio que la magnitud de esta tragedia medioambiental tardará décadas en repararse: “La recuperación no es tan fácil como sacar el petróleo. Uno puede establecer una fecha, utilizar equipo especializado y contratar a personas, pero la recuperación del ecosistema, de toda la biodiversidad, no va a tardar un año, puede tardar décadas”.
La presencia del crudo también afectó la pesca de baja escala y de tipo artesanal, hecho que afecta a centenares de trabajadores y comerciantes de la zona, que ahora han perdido su principal fuente de ingresos.
Pese a los avances diarios en la limpieza del crudo, que afectó a 105 kilómetros del litoral peruano, según la empresa, las huellas del peor desastre ecológico ocurrido en la historia reciente de Perú siguen muy presentes tanto desde el punto de vista ambiental como desde el aspecto social y económico.
Trabajos de limpieza y sanciones gubernamentales contra Repsol
La petrolera Repsol aseguró a través de un comunicado que las tareas de limpieza están avanzadas en un 72% y que su compromiso “es devolver al litoral peruano a su estado natural”.
En dicha presentación, la multinacional aseguró que desplegaron “un equipo humano de más de 2.500 personas para las labores de limpieza en mar y playas” y que está ayudando “a más de 2.800 personas, agrupadas en 34 colectivos de pescadores y comerciantes de Chancay, Ancón, Santa Rosa y Ventanilla”.
Sin embargo, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) multó a la firma con una suma de 358.000 dólares, debido a que consideran desde el gobierno que Repsol se demoró en el plazo dado para la identificación de las zonas afectadas, la limpieza y la contención del petróleo.
OEFA inició además otros tres procesos administrativos sancionadores contra la empresa que podrían derivar en tres sanciones más por unos 14,3 millones de dólares. En tanto, la justicia peruana decretó la imposibilidad de salir del país durante 18 meses a cuatro directivos de la petrolera, entre ellos el Presidente de Repsol Perú, Jaime Fernández Cuesta.