“Tenés tres meses para encontrar trabajo e irte a vivir solo”. El ultimátum que un padre le dio a su hijo de 26 años no le dejó chances más que replantearse su vida y ponerse a construir un futuro distinto.
Esta historia tiene como protagonista a Grant Sabatier, un hombre que con casi un cuarto de siglo seguía viviendo en la casa de sus padres y era mantenido por ellos, a pesar que contaba con un título universitario en Filosofía.
Corría el año 2010 y Grant se encontró con una apremiante situación: sin dinero, sin trabajo y próximamente sin techo. La angustia y la incertidumbre decían ´presente´ por todos los rincones de su existencia.
“Recuerdo haber pensado: ‘Nunca más quiero volver a sentirme así’. Saqué una foto de mi cuenta bancaria como motivación y me marqué como objetivo personal tener 1 millón de dólares en activos en cinco años”, explicó a la cadena CNBC.
Según lo detalla Clarín, el joven en apuros descubrió el mundo del marketing digital y se lanzó de cabeza: durante un mes se encerró para estudiar al detalle cada explicación y cada tutorial que encontró en internet.
Tras esto se presentó para un trabajo, y tuvo éxito: “La primera vez que postulé a un trabajo en marketing digital, lo conseguí”, contó a BBC. De tener casi 3 dólares en el bolsillo, pasó a percibir un sueldo mensual de 4 mil dólares.
Sin embargo, Grant no se quedó allí y fue por más: empezó a construir sitios web y llegó su primer cliente. “El primer sitio que hice fue uno de 300 dólares para un estudio de abogados. No era mucho dinero pero me recomendaron a otro estudio de abogados, y en seis meses, pasé de cobrar $ 300 por contrato a $ 5.000”.
Las cosas parecían no tener techo: al cumplir un año con su nuevo proyecto recibía su proyecto más ambicioso: un contrato por $100.000. Dejó su trabajo de tiempo completo y montó una consultoría: “En un momento llegué a tener 13 fuentes distintas de ingreso”.
“Vivía en un departamento miserable, tenía un auto miserable, y me pasaba casi todo el tiempo trabajando y ahorrando dinero”, aseguró pero seguía tenaz con su esfuerzo por alcanzar la cifra del millón, por eso fundó una segunda empresa junto a otros dos socios.
Cinco años después de tomar aquella captura de pantalla de su saldo de $ 2.26, el joven llegó al millón de dólares. Tenía 34 años y se jubilaba para pasar a vivir de las rentas.
“Junté tanto dinero que me jubilé a los 30 años y hoy me dedico a escribir en mi blog”, narró el gurú financiero a la BBC. “Estoy retirado de la vida corporativa porque no necesito dinero, puedo vivir de las rentas el resto de mi vida”.
¿Qué es la jubilación para él? “No se trata de dejar de trabajar, es hacer lo que te gusta. Desde el inicio mi objetivo era juntar dinero para comprar mi libertad. Nunca me interesó el dinero por el dinero. Mi idea era conseguirlo precisamente para tener independencia financiera”, describió y afirmó que el marketing digital no era su pasión, pero que fue una herramienta para alcanzar su ansiada libertad.
Los motivos del éxito
Grant Sabatier señaló que “Hay un poco de suerte, mucho trabajo duro, ser curioso e invertir bien los ahorros. Llegué a ahorrar el 82% de mis ingresos. Veo el ahorro como una oportunidad, no como un sacrificio. Calculé que por cada US$100 que ahorraba, estaba comprando seis días de libertad en el futuro”.
“Para generar riqueza, es necesario ganar tanto dinero como sea posible con su sueldo. Invertir es realmente la clave de la riqueza. Hable con su empresa de RR.HH. y haga que empiecen a depositar al menos el 20% de sus ingresos directamente en una cuenta de inversión antes de que usted lo vea. Este es el 20% de sus ingresos. Tengo el mío depositado automáticamente directamente en mi cuenta de inversión y el dinero se invierte automáticamente en una combinación de fondos indexados”, puntualizó.
El control de los gastos
“Miro mi patrimonio neto todos los días cuando me despierto por la mañana y tomo mi café de la mañana”, describe Grant. “Hay pocas motivaciones más importantes que ver cómo este número aumenta con el tiempo. No importa de dónde empieces. He estado rastreando mi patrimonio neto durante los últimos cinco años y mi primer saldo fue de $ 2.26”.
“Al final de cada año, me sumerjo más en estos datos y hago un seguimiento de lo que he gastado el año pasado en todo para poder trabajar para mejorar mis gastos”, escribe este gurú que ahora vive en Nueva York junto a su esposa y asegura que vive una vida tranquila sin gastos excesivos. “No necesito el lujo para ser feliz”.