Un total de doce personas resultaron heridas cuando un avión de Qatar Airways que volaba de Doha con destino a Dublín sufrió turbulencias, según informaron las autoridades aeroportuarias en las últimas horas de ayer. De acuerdo al reporte policial, ocho de los heridos fueron hospitalizados.
Luego, el aeropuerto de Dublín indicó en un comunicado que el vuelo QR017, un Boeing 787 Dreamliner, aterrizó sin problemas antes de la 1 de la tarde (12.00 GMT). Además, detalló que al aterrizar, el avión fue recibido por los servicios de emergencia, incluyendo la policía aeroportuaria y elementos de bomberos y socorristas.
El operativo se debió a que “seis pasajeros y seis miembros de la tripulación... señalaron haber sufrido lesiones después que el avión experimentara turbulencias cuando sobrevolaba Turquía”. El aeropuerto también indicó que todos los pasajeros fueron evaluados por lesiones a bordo del avión y que ocho fueron trasladados al hospital.
Uno de los pasajeros, Paul Mocc, manifestó a la emisora irlandesa RTE que vio “gente golpeando el techo” y comida y bebida volando por todas partes. Otra viajera, Emma Rose Power, relató al mismo medio que después de la turbulencia, “algunas de las asistentes de vuelo que vi tenían rasguños en la cara, tenían hielo en la cara. Había una niña que tenía un cabestrillo en un brazo”.
Por su parte, Qatar Airways declaró en un comunicado que “un pequeño número de pasajeros y miembros de la tripulación sufrieron heridas leves durante el vuelo y están recibiendo atención médica”. En esa misma línea, señaló que “el asunto está ahora sujeto a una investigación interna”.
Cabe destacar que el incidente se registra cinco días después que un británico murió, al parecer de un ataque al corazón, y decenas de personas resultaron heridas cuando un vuelo de Singapore Airlines procedente de Londres sufrió fuertes turbulencias. Aunque las muertes relacionadas con las turbulencias son poco frecuentes, las lesiones se han ido acumulando a lo largo de los años.
Ante esto, algunos meteorólogos y analistas de la aviación señalan que los informes sobre encuentros con turbulencias también han ido en aumento y apuntan a las posibles repercusiones que el cambio climático puede tener en las condiciones de vuelo.