En un operativo a escala europea, la policía alemana lleva a cabo la mañana de este miércoles varias redadas en cinco estados federados contra miembros de la mafia italiana, hasta ahora dejando como saldo una treintena de detenciones y decenas de registros, en el marco de una operación a gran escala en varios países europeos dirigida por Europol y Eurojust.
En total, el saldo de detenidos acusados de estar vinculados a la mafia calabresa es de más de 100 personas en distintos países de Europa, y cada operativo incluyó la participación de las policías locales y de fuerzas especiales coordinadas por Europol luego de un seguimiento prolongado.
Los sospechosos están acusados de blanqueo de dinero, evasión fiscal en banda, fraude comercial en banda y contrabando de drogas. Las fiscalías precisan en el comunicado que el operativo policial es “un proceso relacionado con el crimen organizado italiano, que se dirige contra responsables y miembros de la ‘Ndrangheta”.
Según la oficina bávara de la policía judicial, las autoridades alemanas actuaron en el marco de la “operación Eureka”, en coordinación con Europol. El ministro del Interior de Baviera, Joachim Herrmann, calificó esta operación de “golpe contra la ‘Ndrangetha”, una organización criminal implantada en la región italiana de Calabria y considerada como la mafia más rica y poderosa de Italia, y con un radio de acción que alcanza a más de 40 países.
Probablemente sea el mayor golpe policial contra la mafia desde la operación “Rinascita Scott” en 2019. Desde luego, la operación actual, lanzada a nivel europeo hace más de tres años, es “una de las más importantes y significativas de estos últimos años en el ámbito del crimen organizado en Italia”, según la policía bávara. Dispositivos similares se llevaron a cabo en Bélgica, Francia, Italia, Portugal y España. Esta “operación de gran envergadura” fue organizada en el marco de un “dosier abierto por la fiscalía federal belga”, en cooperación con la policía judicial belga y las agencias europeas Europol y Eurojust, detalló la Fiscalía belga.
En Alemania, las medidas se centran sobre todo en Renania del Norte-Westfalia y Renania-Palatinado (oeste), con unos 500 agentes desplegados en cada uno de estos estados federados. En el primero se registraron 51 casas, pisos, oficinas y locales comerciales y se llevaron a cabo 15 detenciones, mientras que en Renania-Palatinado se emitieron 50 órdenes de registro y fueron diez los detenidos.
En las próximas horas el número de detenciones puede aumentar, debido a que la operación continúa en marcha en todo Europa.