La tormenta tropical Ida provocó la noche del miércoles espectaculares inundaciones repentinas en la región de Nueva York, con saldo de al menos a 13 muertos, obligando a declarar el estado de emergencia y desatando escenas de caos.
La Policía señaló que nueve personas murieron en la ciudad de Nueva York, mientras que cuatro perdieron la vida en Elizabeth, en el vecino Nueva Jersey, dijo a la agencia AFP un portavoz de la alcaldía.
Con estos 13 fallecidos se elevan a 20 las víctimas fatales tras el ingreso de Ida el domingo como huracán categoría 4 en Luisiana, abriendo una senda de destrucción hacia el norte.
Las calles se convirtieron en ríos en algunas partes de la capital comercial y cultural de Estados Unidos.
Las estaciones de metro también estaban inundadas y el servicio tuvo que interrumpirse, según la Autoridad Metropolitana de Transporte, que gestiona el sistema de transporte público de Nueva York.
El Servicio Meteorológico de Estados Unidos (NWS) registró un récord histórico de 80 mm de lluvia en una hora en Central Park.
En plena noche, la nueva gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul, declaró el “estado de emergencia” tras las “importantes” inundaciones en todos los condados limítrofes con la ciudad de Nueva York, que podrían afectar a unos 20 millones de personas.
Bill de Blasio, el alcalde saliente de la ciudad de Nueva York, deploró en un tuit un “acontecimiento meteorológico histórico” y declaró también el “estado de emergencia”.
Cientos de vuelos fueron cancelados en los aeropuertos neoyorquinos de Newark, LaGuardia y JFK.
Según el Servicio Meteorológico Nacional estadounidense (NWS), es el primer estado de emergencia por inundaciones repentinas que se declara en la historia de la megalópolis, golpeada en octubre de 2012 por el huracán Sandy.
La lluvia comenzó a caer a las 21.30 y según varios vídeos publicados en Twitter por el NWS las calles de Brooklyn y Queens estaban inundadas, haciendo imposible el tráfico.
”No conduzca por las calles inundadas. No sabemos qué profundidad tiene y es muy peligroso. Dé media vuelta”, instó el servicio meteorológico.
Las fuertes lluvias y los vientos también barrieron el condado de Westchester, al norte de Nueva York, y muchos sótanos de casas se inundaron en cuestión de minutos.
El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, declaró también el estado de emergencia debido a las lluvias torrenciales que dejaron un muerto.
Además de Nueva York y sus alrededores, se emitió una alerta de tornado en Filadelfia.
La tormenta provocó una escena surrealista en Flushing Meadows, donde la lluvia barrió una pista de tenis cubierta e interrumpió un partido de segunda ronda del Abierto de Estados Unidos entre el sudafricano Kevin Anderson y el argentino Diego Schwartzman.
El agua entró por las cuatro esquinas del techo del recinto, que se colocó en 2018 específicamente para permitir que los partidos se jugaran a pesar de la lluvia.
Se espera que Ida continúe este jueves hacia el norte, en dirección de Nueva Inglaterra.