Familias desesperadas esperan hoy martes noticias de sus seres queridos, después de que un edificio en construcción en Lagos, la capital económica de Nigeria, se derrumbara y dejara al menos siete muertos y decenas de trabajadores atrapados bajo los escombros.
El edificio de 21 pisos ubicado en una de las avenidas más exclusivas de Lagos, en el barrio de Ikoyi, colapsó el lunes un poco antes de las 15hs, hora local, cuando una decena de trabajadores se encontraban en la obra. Los servicios de emergencia aseguran haber rescatado de los escombros a siete personas con vida, pero los trabajadores temen que decenas de sus colegas sigan atrapados en el interior.
En un comunicado publicado el lunes por la noche, el presidente nigeriano Muhammadu Buhari exhortó a las autoridades a “intensificar los esfuerzos en las operaciones de rescate”. Los derrumbes de edificios son tragedias frecuentes en Nigeria, el país más poblado de África, donde millones de personas viven en inmuebles ruinosos y donde la legislación relativa a la construcción es regularmente violada.
Los residentes de la zona calculan que había alrededor de medio centenar de obreros en el edificio cuando se vino abajo. Los servicios de rescate siguen trabajando a contrarreloj en el lugar.