Se acerca el verano y diversas personas se acercan a los gimnasios para realizar distintos tipos de abdominales y planchas para lograr marcar los famosos “cuadraditos”. Sin embargo, este último ejercicio resulta tedioso y los segundos se convierten en una eternidad, salvo para un niño ruso que se convirtió en tendencia mundial.
Abdul Rakhim Getagazov, de tan solo 11 años, rompió una marca que parecía imposible y que adueñó del récord de la plancha más larga del mundo: consiguió estar con su abdomen trabado durante 11 horas, 11 minutos y 11 segundos.
Lejos quedó el registro anterior que ostentaba otro deportista que había hecho la misma prueba pero durante 9 horas y media. Al pequeño ruso le sobraron casi dos horas y se garantizó mantener ese prestigioso lugar por un amplio margen de diferencia.
La extensa plancha realizada por Abdul fue supervisada por Stanislakv Konenko, editor en jefe y fundador del Libro de los Récords de Rusia, junto a un bloguero de Ingushetia, llamado Akhmed Osmiev, de 35 años, quien fue el responsable de inmortalizar el logro a través de un video publicado por el canal de YouTube Videlo.
La importante marca conseguida por Abdul Rakhim Getagazov hizo eco en Rusia y en todo el mundo debido al tiempo que estuvo el pequeño boca abajo, apoyado con sus antebrazos y endureciendo la zona abdominal. Luego del récord, el menor recibió las felicitaciones del Primer Viceprimer ministro interino de Ingushetia, Magomed Yevloyev.
Una corta vida de entrenamiento
Desde los 3 años, Abdul Rakhim Getagazov entrena a la par de distintos profesores, realizando levantamiento de barras, flexiones y abdominales. Luego empezó a practicar planchas y lo hacía durante dos o tres horas, hasta que con el correr de los meses pudo afianzarse en la práctica, batiendo el récord mundial.