Los ministros de Economía del G7, compuesto por las principales potencias económicas del mundo, rechazó este lunes 28 de marzo la demanda del presidente ruso, Vladimir Putin, de que los compradores de gas de Rusia paguen en rublos.
”Esto no es aceptable y pedimos a las empresas involucradas que no cumplan con la solicitud del presidente ruso Putin”, dijo a los periodistas en Berlín el ministro de Economía alemán, Robert Habeck, tras celebrar una videoconferencia con sus homólogos del G7. ”Todos los ministros han coincidido plenamente en que se trata de una medida unilateral y un claro incumplimiento de los contratos existentes”, agregó Habeck.
Putin ordenó más temprano en el día al Gobierno, el banco central y la empresa Gazprom a cambiar a rublos la divisa de pago por entregas de gas a “países hostiles” antes del 31 de marzo.
Las instituciones tendrán que implementar “una serie de medidas para cambiar al rublo ruso la moneda de pago de los suministros de gas natural a la Unión Europea y otros países que han introducido medidas restrictivas contra ciudadanos de la Federación Rusa y entidades legales rusas”, señaló un comunicado del Kremlin.
El 23 de marzo, Putin señaló que ya no hay razón para seguir usando el dólar y el euro luego de que EE.UU. y la UE sancionaran al Estado ruso y a todas sus empresas, alterando le flujo comercial de recursos que hasta ahora se había construido.