El gobierno de México disolvió hace más de un año una unidad élite antinarcóticos que entrenó la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) para combatir el crimen organizado debido a que el grupo supuestamente “estaba infiltrado por la delincuencia”, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador este miércoles.
Sin embargo, el mandatario mexicano señaló en su habitual rueda de prensa matutina que su gobierno mantiene cooperación “con organismos internacionales encargados de seguridad” y que los líderes del grupo “están siendo investigados”.
López Obrador agregó que hay miembros de la unidad policial que ahora están presos, aunque evitó mencionar sus nombres. Tampoco explicó por qué su gobierno no anunció la desaparición de la unidad en su momento.
El presidente recordó que su gobierno aprobó en diciembre de 2020 una reforma para regular a los agentes extranjeros del país, la cual se aprobó tras la detención en octubre del mismo año del exsecretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, en Estados Unidos y por una investigación de la DEA sobre presuntos vínculos con el narcotráfico.
En ese momento, México expresó su malestar por no haber sido notificado del operativo, pero Washington retiró poco después los cargos contra el militar y lo envió de vuelta a México.
