El miércoles pasado un meteorito de gran tamaño cayó en Texas y sorprendió a los científicos de la NASA. Durante la tarde, los habitantes de Lower Rio Grande Valley se sorprendieron al escuchar una gran explosión cerca de las ciudades de Mission y McAllen.
Ese estruendo resultó ser la caída de un meteorito que encendió todas las alarmas. Ahora la NASA estudia el origen del bólido que, según indicaron desde el organismo, pesa como un piano de cola.
El meteorito denominado Meteor Watch se encuentra bajo estudio y según la NASA creen que viajó a unas 27. 000 millas por hora.
Pero respecto al sitio CBS News, el ángulo y la velocidad con la que el objeto entró en la atmósfera, así como las imágenes del radar meteorológico, le permitió a la NASA determinar que probablemente se trataba de un meteorito.
“La Oficina de Ciencia de Investigación y Exploración Astromateriales de la NASA en el Johnson Space Center en Houston está trabajando con la Oficina de Medio Ambiente de Meteoroides de la agencia en el Marshall Space Flight Center en Huntsville, Alabama, en este análisis”, explicaron desde la NASA en un comunicado oficial.
Durante el jueves, las autoridades locales dieron un informe para tranquilizar a la población sobre lo sucedido. Fue entonces que el jefe de la Policía de Mission, Cesar Torres, declaró para el medio Valley Central que el personal de emergencias de esta zona recibió más de 100 llamadas en las que preguntaban qué había pasado.
A través de su sitio web oficial, la NASA informó que el objeto fue un meteoroide de unos 60 centímetros de diámetro, con un peso aproximado de mil libras, es decir, 453.5 kilogramos.
El comunicado detalló que los meteoritos suelen golpear la atmósfera terrestre a gran velocidad y eso hace más lento su viaje, por lo que los fenómenos del cielo se rompen en pequeños fragmentos antes de tocar el suelo de la Tierra.