Según el periódico estadounidense The Wall Street Journal, la última propuesta de Israel mediada por EE.UU. contemplaba el regreso de 150.000 palestinos al norte de Gaza y que la primera fase de la tregua acarrease la liberación de 40 rehenes en la categoría humanitaria, esto es niños, mujeres y ancianos, pero según informó el diario local Walla News, Hamás habría asegurado no tener a tantos cautivos vivos que cumplen esas características y ofrecieron, a cambio, la liberación de soldados y rehenes varones.
Por su parte, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu anunció, por primera vez, tener “una fecha” prevista, que no reveló y EE.UU. dice desconocer, para la invasión de Rafah, donde quedan activos cuatro batallones de Hamás que impiden la “victoria absoluta” sobre la organización islamista y la aspiración de que no constituya nunca más una “amenaza” para Israel.
“Completaremos la eliminación de los batallones de Hamás, incluso en Rafah. No hay fuerza en el mundo que pueda detenernos”, insistió ayer el líder hebreo durante su visita a la base militar de Tel Hashomer, en el centro del país, reunido con nuevos reclutas en puestos de combate y de vigilancia.
Al mismo tiempo, Israel enfrenta múltiples amenazas, ya que a las palabras del ayatola Jamenei sobre la “venganza” por la muerte de altos mandos de la Guardia Revolucionaria, el ministro de relaciones exteriores Israel Katz publicó en sus redes sociales que “si Irán lanza ataques desde su territorio, Israel reaccionará y atacará a Irán”, arrobando la cuenta de Jamenei. El mensaje lo publicó en hebreo y en árabe.
También las FDI publicaron anuncios sobre la eliminación de infraestructura militar terrorista en Siria, desde donde está operando Hezbolá para atacar a Israel, ante lo cual el ejército responsabilizó al régimen de Bashar Al Assad por avalar y promover la actividad terrorista en su territorio, advirtiendo que no permitirán que esto prospere.
Israel, con una población de menos de 10 millones de habitantes, está rodeado de países árabes entre los cuales se cuentan, en total, más de 400 millones de personas, repartidas entre los 21 territorios musulmanes que componen la región.